“La Asamblea de Norte de Santander se hace partícipe de la satisfacción y el regocijo que embargan a la municipalidad y el pueblo de Durania con motivo de la inauguración de la planta eléctrica y del parque Justo L. Durán y al presentarles sus más vivas congratulaciones rinde homenaje de admiración y estímulo al espíritu público, fervor democrático y laboriosidad ejemplar de sus hombres de ayer y de hoy, que han hecho de Durania una de las más florecientes poblaciones del Departamento.

Transcríbase a la Honorable municipalidad de Durania en nota de estilo, que será entregada por una comisión de esta Asamblea, publíquese por carteles y por la prensa.”

Era la proposición presentada por el diputado José Manuel Villalobos en la sesión del día 17 de junio de 1938 y aprobada unánimemente.

Durante la primera mitad del siglo XX, algunas poblaciones de Norte de Santander tenían una mayor importancia que la que hoy detentan. La centralización de las actividades económicas, sociales y políticas en torno a las capitales de los distintos departamentos, en Colombia, han relegado a las demás poblaciones intermedias a jugar papeles de menor importancia acarreando problemas, como la migración del campo, desprotegiéndolo y trasladando sus inconvenientes a las ciudades capitales con las consecuencias que hoy todos conocemos.

Durante el decenio de los treinta, algunas poblaciones, jalonadas de la mano de verdaderos emprendedores, se dieron a la tarea de buscar soluciones a sus problemas promoviendo obras que beneficiaran a la población entera sin otro propósito que el bienestar y progreso de la comunidad. Esta perspectiva de espíritu público y laboriosidad ejemplar hizo de Durania uno de los municipios más ricos y dinámicos. El carácter acogedor y noble de sus hijos y su liberalismo puro e irreductible, arraigado desde su fundación, llevaron a los pioneros a levantar sus casas y fundar las primeras fincas cafeteras. Desde entonces, conductores de la talla Justo Leonardo Durán, Carlos Vásquez y otros tantos caballeros del ideal y del bien, crearon la escuela del trabajo y del esfuerzo, y levantaban la cátedra doctrinaria que hoy germinaba frondosamente.

El municipio de Durania celebraba en ese momento, 27 años de creado y el 23 de marzo, se engalanaban las casas de la población con el tricolor nacional, además, no se trabajaba y se conmemoraba su fundación con un acto protocolario por el cual, desde hacía tres años, el Concejo Municipal imponía la distinción ‘Medalla del Civismo’ al ciudadano que se hubiera hecho digno de ella. En esta tercera imposición, el cabildo, ajustado a las más claras normas de justicia, concedió la Medalla del Civismo al doctor Efraín Vásquez, verdadero orgullo de esa tierra y uno de los valores políticos más destacados del Norte de Santander, heredero de las virtudes de ese varón austero y gran luchador que fue su padre don Carlos Vásquez R. formado en un ambiente de trabajo y de rectitud, educado con esmero, joven y dueño de una inteligencia superior, ha tenido una influencia muy señalada en la prosperidad  de Durania y las obras públicas, especialmente, han recibido la valiosa colaboración de su actividad y su esfuerzo.

Como diputado, como concejal o simplemente como hijo de Durania, Efraín Vásquez ha sido un constante interesado y meritorio servidor de su pueblo y por ello, bien lucirá sobre su pecho la Medalla del Civismo, como puede leerse en las crónicas que sobre este acontecimiento se publicaron.

Ahora veamos cuáles fueron las obras importantes que se inauguraron y que fueron motivo de grandes satisfacciones para el municipio:

- La planta eléctrica, de fabricación sueca, con una capacidad de 120 caballos, que ofrece plenas garantías, fue instalada y dirigida su construcción por el ingeniero electricista Gustavo Wilches con la colaboración del doctor Humberto Cadavid. La población fue profusamente iluminada en sus principales instalaciones, en las calles, en el parque y en las puertas de las casas, donde se colocaron unas lámparas especiales. El costo de la planta se estimó en $36 mil de los cuales el Departamento aportó el 50%. Con este nuevo servicio se espera suministrar energía a las fincas rurales que la soliciten, particularmente para el movimiento de su maquinaria, lo cual se espera permita un mayor desarrollo agrícola e industrial.

- El parque Justo L. Durán, se ha distribuido en parcelas que han sido confiadas para la formación y cuido de los jardines a las familias  de la población. Las señoras y señoritas han recibido con gran satisfacción y entusiasmo la misión que les ha confiado la Junta de Mejoras Públicas. Las columnas del alumbrado con cinco bombillas cada una, fueron obsequiadas  por los vecinos, lo mismo que los escaños en cemento.

- La piscina, aunque le agregaban el nombre de ‘olímpica’, técnicamente no tenía las dimensiones convenidas, pues sólo tenía 27 metros de longitud, diez de ancho y tres y medio de profundidad, sin embargo, constituía un orgullo para el pueblo y según decían, era la primera de su género en el país.

- La Cooperativa de Caficultores de Durania, era una de las más activas  y de gran influencia en el desarrollo económico de la región. Durante varios años fue el apoyo para los productores cafeteros locales a quienes otorgaba créditos para impulsar sus actividades. Para ese año, su cartera de asociados era del orden de $80 mil,  cifra considerable para la época, si se tiene en cuenta que el presupuesto anual del municipio era de tan solo $30 mil. Años más tarde, a mediados de los años setenta, tuve la oportunidad de financiar algunas de sus actividades que habían migrado a una empresa mediana de confecciones, cuando la actividad cafetera desmejoró sus finanzas, precisamente por iniciativa del doctor Efraín Vásquez, a la sazón miembro de la Junta Directiva de la Corporación Financiera del Oriente S.A.

- Por último, el Colegio de Señoritas, que de conformidad con lo dispuesto por la Asamblea Departamental, se esperaba que iniciara su funcionamiento el año siguiente, como efectivamente sucedió, aprovechando la presencia de los altos dignatarios del Departamento en cabeza del gobernador Miguel Durán Durán.

Redacción
Gerardo Raynaud D.
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