La Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) respondió a las críticas lanzadas por el presidente del partido Comunes, Rodrigo Londoño, en las que acusa a la institución de presentar demoras en sus procesos y no actuar de manera ágil e imparcial.

Frente a estas acusaciones, el presidente de la justicia transicional, magistrado Alejandro Ramelli destacó que el modelo de justicia restaurativa utilizado por la JEP y cuyo centro son las víctimas ha sido reconocido por la OCDE y ha permitido la participación individual y colectiva de alrededor de 400.000 víctimas.

“La verdad judicial ha permitido que las heridas empiecen a sanar y que las víctimas empiecen a encontrar a sus desaparecidos”, declaró Ramelli.

Por otro lado, señaló que quienes se someten a la JEP dependen de sus aportes de verdad, no repetición y de que sus respuestas a las víctimas sean satisfactorias sobre los crímenes cometidos.

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Además, aseguró que los integrantes de la Fuerza Pública y terceros civiles han cumplido con su comparecencia ante la JEP, lo que les permitirá tener derecho a una sanción propia y a resolver su situación jurídica, siempre y cuando asuman su responsabilidad de manera pública.

“El Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, los países garantes y acompañantes del Acuerdo Final de Paz y la Corte Constitucional conocen y han resaltado los esfuerzos de la JEP que con sus medidas cautelares ha movido a las instituciones de Colombia para que se respete la vida y seguridad de más de 9 mil firmantes de Paz”, sostuvo Ramelli.

El magistrado también explicó que el avance, “dentro de la estricta temporalidad”, de los 11 macrocasos de la JEP compromete no solo a la Jurisdicción, y a sus distintas instancias, sino a todas las ramas del poder público y a las víctimas.

“Y sobre todo, depende de los comparecientes, agentes de Estado y terceros, miembros de la Fuerza Pública y también firmantes de Paz de quienes se espera respeto a la ley y al Acuerdo y sus aportes decididos y sin dilaciones a la verdad”, enfatizó.

En los últimos meses, los excomandantes de la desaparecida guerrilla de las Farc han hecho duros cuestionamientos frente al proceder de la Jurisdicción Especial para la Paz y han insinuado que esta instancia que surgió del Acuerdo de Paz “se ha descarrilado” y que terminará siendo “un fracaso”.

La semana pasada, Londoño hizo pública una carta dirigida a la comunidad internacional, en la que exhorta a los países miembros del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, a Cuba y Noruega, como garantes del Acuerdo, a examinar lo que, en su criterio, viene ocurriendo con la JEP.

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“Expertos juristas y académicos, además de firmantes de paz, hemos hecho numerosas observaciones en torno al curso que los magistrados y magistradas han venido imprimiéndole a la Jurisdicción Especial para la Paz. La magistratura de la JEP, lamentablemente, suele carecer de disposición reflexiva y, antes bien, materializa día a día, en sus resoluciones y pronunciamientos, la doctrina penal del enemigo que se buscó proscribir del Acuerdo”, dice el documento.

Y después de insistir en sus críticas a la forma en que está procediendo la JEP, Rodrigo Londoño aseguró que los firmantes de paz han encendido las alertas ante lo que consideran riesgos por las actuaciones, omisiones y declaraciones de los magistrados.

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