Luisa Romero vive en El Carmen. Cultiva aguacate en la tierra que la vio nacer, donde respira aire fresco cada mañana. “Quien viene al Catatumbo se enamora, y si no lo hace es porque está ciego. Aquí el verdor te cautiva”, dice. Su municipio, como ella misma se lo apropia, forma parte de los 11 que forman esta región de Norte de Santander.

Son 1.133.599 hectáreas que representan el 52 por ciento del territorio del departamento, con siete cuencas de agua dulce y un 60 por ciento de zona altamente montañosa. Esta zona cuenta con 112 humedales en un área de 238 hectáreas, distribuidos en 18 veredas en los municipios de Tibú y Sardinata. 

Esto es solo una muestra de lo rica que es la tierra y el suelo del Catatumbo. De esto es consciente Luisa, quien tiene 56 años viviendo en El Carmen, el segundo municipio de esta región con la extensión de bosque más amplia. “En las tierras del Catatumbo hay de todo, agua en abundancia, producción agrícola, pecuaria, aquí se produce el mejor café de Colombia”, atina. 

La Corporación Autónoma Regional de la Frontera Nororiental (Corponor) levantó un diagnóstico ambiental de esta región, por ser una zona vital para el departamento. El documento fue entregado al presidente Iván Duque, pues se busca afianzar proyectos e inversiones en la zona para seguir trabajando en temas que también están a la vista de todos, como la deforestación.

Son 515.408 hectáreas de bosque que representan el 55,5 por ciento en los bosques que hay en el departamento. Esta extensa masa de verdor, como bien la califica Luisa, también le ha tocado sufrir los embates de la deforestación que en cuatro años (2014-2017) alcanzó una cifra de 30.871 hectáreas que perdieron su verde intenso y quedaron desprovista del follaje de los cedros, la ceiba, el abarco, el perrillo, el lechero, el cascarillo, la majumba y el caraño. Árboles característicos de esta zona.

El director de Corponor, Gregorio Angarita, explicó que en el informe se presentó al detalle cómo se ha ido trabajando en superar el tercer lugar en deforestación que tenía el departamento. 

Y precisamente donde vive Romero (El Carmen) junto con Tibú, El Tarra y Sardinata son los que presentaron la mayor deforestación, precisa el informe. Sin embargo, según del Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) en el núcleo de deforestación de Norte de Santander (Tibú y Sardinata) se presentó una disminución del 46 por ciento entre el año 2016 y 2017.

¿Qué es lo que más ha afectado a los bosques del Catatumbo? Entre 2005 y 2015 unas 30.500 hectáreas de bosque se perjudicaron con los cultivos de coca, esto según la Oficina de la Política Nacional para el Control de Drogas (Ondcp). De estas, 23.179 hectáreas fueron degradadas y el resto deforestadas. 

“La mayor afectación se observó en los municipios de Tibú, El Tarra, Teorama, Sardinata, La Playa, San Calixto y Bucarasica”, detalla el diagnóstico.

Sin embargo, también el trabajo agrícola ha afectado este suelo. En Tibú el mayor porcentaje de deforestación se atribuye a áreas agrícolas heterogéneas y pastos. Lo mismo ocurre con los hidrocarburos, pues en el 2017, indica Corponor, se identificaron 36 instalaciones fraudulentas, y durante este año ya se han identificado y retirado 592 válvulas ilícitas en la línea de campo Tibú. 

Angarita precisó la necesidad del trabajo que están haciendo para articular a los alcaldes del Catatumbo, y lograr unificar los criterios de conservación ambiental para hacer una mejor inversión de los recursos en esta materia. “Vamos a hacer un bosque de paz en el área que corresponde al corregimiento de Pacelli, en Tibú, así como unos viveros”, dijo.

Este proyecto tiene una inversión de más de 2.994 millones de pesos. Estos recursos viabilizados a través del Fondo Nacional Ambiental (Fonam) y el Departamento Nacional de Planeación (DNP), están a la espera de ser distribuidos por el Ministerio de Ambiente y Desarrollo Sostenible.  

Además, se van a presentar al Gobierno  nacional las riquezas que en materia de humedales tiene el Catatumbo. “Esta región va a ser verdaderamente tomada en cuenta a nivel nacional, en lo que corresponde a humedales”, precisó.

En materia de acciones de mitigación al cambio climático y deforestación, la inversión está por el orden de los 2.700 millones de pesos, dijo Angarita. 

El director de Corponor agregó que están apostando a la producción de productos en esta zona, a través de una economía sostenible ambientalmente, donde los mayores favorecidos sean los habitantes de la región y los enormes recursos naturales que tiene el Catatumbo, tal como señala Luisa Romero: la riqueza de mi tierra es incalculable.

Proyectos en formulación

La Corporación Autónoma Regional de la Frontera Nororiental (Corponor) tiene una serie de proyectos que se encuentran en fase de formulación, estructuración y gestión para el Catatumbo. 

Entre esos se encuentra la implementación del plan de repoblamiento en las fuentes hídricas de los municipios Convención, El Carmen, Teorama y El Tarra, por un valor de más de 750 millones de pesos. Así como una serie de obras de mitigación al cambio climático y la deforestación en 10 de los 11 municipios por más de 3.800 millones de pesos.