Comerciantes de la provincia de Ocaña y zona del Catatumbo ven con buenos ojos los anuncios del nuevo presidente de la República, Gustavo Petro, por la apertura de la frontera con el vecino país de Venezuela.
El director ejecutivo de la Cámara de Comercio, Rubén Darío Álvarez Arévalo calificó como positiva restablecer relaciones con un socio estratégico para el intercambio de productos agrícolas y manufacturados.
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“Es una buena noticia estrechar esos lazos diplomáticos con la República Bolivariana de Venezuela dando prioridad al vínculo comercial. Era un pedido silencioso que la clase empresarial de Norte de Santander quería”, agregó.
Asegura que existe una macro política que a veces entorpece las relaciones y fue bastante duro el rompimiento con el vecino país, ya que se perdió mucho capital y esfuerzos de los productores de la región.
Esa decisión ocasionó el descalabro económico de muchas empresas de la región, porque no se les cancelaron las deudas en la otra línea limítrofe. “Ahora, al estar dolarizado, mejoran las expectativas y esperamos que la apertura de la segunda frontera más activa de Latinoamérica se dé lo más pronto posible donde se mueven los 6 mil a 7 mil millones de dólares”, precisó.
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Fortalecer el sistema productivo
El director ejecutivo indicó que Venezuela está necesitando de todo y es la oportunidad de fortalecer los esquemas de comercialización de productos desde la zona del Catatumbo.
“Es un mercado atractivo y los fenómenos migratorios pensamos que el país está quebrado y eso es complemente falso, ya que existe un ritmo de negocios diferente hacia donde se debe apuntar”, reiteró Álvarez.
Explica que antes existía una inestabilidad total en la economía y al implementar el sistema cambiario a través del dólar se ha normalizado y el empresario puede entrar a negociar.
Recomienda un pacto para el cumplimiento de las obligaciones adquiridas para garantizar el éxito del proceso.
Indica que el fenómeno migratorio ha disminuido en los últimos meses y eso es un buen síntoma, ya que se logró una estabilidad económica, comercial e industrial. “Necesitamos que las relaciones comerciales fluyan, ya que las pérdidas por ese cierre de frontera son incalculables. Pasar de casi 6 mil millones de dólares a nada, multiplique por 4 .200 pesos y el resultado son cuantiosas sumas de dinero dejadas de percibir en los últimos años”, puntualizó.
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Resarcir pérdidas
El presidente de la Asociación de Comerciantes de la provincia de Ocaña, Javier Ortiz Navarro aseguró que son muchas las ventajas con el fin de salir del estancamiento económico de una región tan rica como es el Catatumbo.
La zona es de vocación agropecuaria y se deben aprovechar esos mercados para el intercambio y fortalecer la exportación.
Señala Ortiz que cobra importancia en estos momentos de reacomodo en aspectos geopolíticos internacionales con la invasión de Rusia a Ucrania.
“En esas retaliaciones los Estados Unidos buscan otros escenarios para la comercialización del crudo con Venezuela, ese proceso de reactivación de la industria petrolera repercute en cuanto al desarrollo minero energético con los países vecinos. Esperanzador para el Norte de Santander y en especial la zona del Catatumbo como despensa agrícola, ya que dinamiza la economía y a cambio se reciben hidrocarburos y suministro de insumos para la industria local”, precisó.
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