El pasado jueves 28 de agosto se realizó en el auditorio de Asinort el VI Foro Garzonista Pensamiento Crítico en la Era Digital: Valores, Antivalores y Responsabilidad Social. Este importante esfuerzo lo viene realizando la comunidad educativa del Colegio Jaime Garzón, en el marco del proyecto Democracia, Paz y Derechos Humanos.
Dicha iniciativa es una estrategia pedagógica transversal de discusión académica para los jóvenes de los diferentes colegios de los grados décimo y once, en especial de las comunas 6, 7 y 8 de la Ciudadela Juan Atalaya.
En esta oportunidad, más de 800 estudiantes y profesores se dieron cita, como en los últimos 6 años, para discernir sobre temáticas pertinentes a las realidades que nos circundan y que, de manera directa, benefician o afectan a la población estudiantil. La línea temática propuesta fue sobre el pensamiento crítico y la desinformación en la era digital, los retos frente al uso de la tecnología en la educación y las competencias emocionales en el uso de la tecnología y las redes sociales, que tanto preocupan a la sociedad moderna.
Es muy evidente que en la actualidad los seres humanos estamos sufriendo cambios en nuestra dinámica en las formas de aprender, de comunicarnos, de encontrarnos con el otro y, sobre todo, de nuestra responsabilidad social con el entorno y el planeta. Es muy interesante observar cómo los jóvenes y la comunidad educativa participaron y aportaron al debate sobre diversos temas relacionados a este campo de la investigación.
En lo que a mí respecta, me correspondió compartir con ellos la ponencia sobre las reflexiones filosóficas del pensamiento crítico en la tecnología, retos y desafíos que tenemos frente a estas teorías de la complejidad en el mundo actual. La filosofía de la tecnología sirve para saber a fondo el uso práctico que se les da los objetos tecnológicos, más allá del uso teórico que deben tener.
Una de las principales finalidades de esta filosofía es identificar los cambios o retrasos que hay en la tecnología, cómo se utiliza según la cultura, pueblo o pensamiento, investigando cómo un mismo objeto puede tener mayor o menor avance según la manera y el lugar donde se utilice.
También busca las características y la comprensión de los sistemas sociales, económicos y políticos, para así crear técnicas o tecnologías que satisfagan las necesidades requeridas, pero puntualmente, para mejorar la calidad de vida de los individuos.
Además, intenta resolver algunas de las siguientes preguntas; ¿qué es la tecnología y en qué se diferencia de la técnica?, ¿qué relación hay entre ciencia, técnica y tecnología?, ¿tiene mucha importancia la tecnología hoy en día?; y si la tiene, ¿siempre ha sido así?, ¿nos afecta la tecnología? ¿Cómo?, ¿puede llegar a poner en riesgo nuestra existencia individual y como especie?, ¿puede servirnos la ciencia y la tecnología para mejorar nuestra situación y circunstancia?
En palabras dichas por José Ortega y Gasset: “Sin la técnica el hombre no existiría ni habría existido nunca”. Las técnicas son sistemas de habilidades y reglas que sirven para resolver problemas. Las técnicas se inventan, se comunican y se aplican. Es necesario que la filosofía actúe como catalizadora de esta reflexión, integrando saberes muy diversos y generando espacios de diálogo detenido en los que se formulen las preguntas relevantes relacionadas con estos desafíos. Estas preguntas son muchas y nada fáciles de responder. Resalto con inmensa alegría la posibilidad que desde la hermosa Cúcuta estemos desarrollando pensamiento filosófico a diario. Felicitaciones y gracias por tan importante invitación.
luisfernino@hotmail.com
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