Cada día crecen los informes sobre los avances del coronavirus en la mayoría de los países del orbe a la vez que se resaltan algunos resultados en China y Estados Unidos sobre el desarrollo de las vacunas. Mientras China dice que un equipo de investigación desarrolló una vacuna en consonancia con estándares internacionales y regulaciones legales locales, Estados Unidos anunció el martes sobre los primeros ensayos en humanos de una posible vacuna a los que será sometidos 45 voluntarios sanos.
En tanto que en la mayoría de los países se toman medidas de protección como las de tapabocas, saludos y aislamiento, en otros como México, se pasan por alto. El presidente mejicano, Andrés Manuel López Obrador, ha recibido duras crítica por el desacato a estas recomendaciones, pues en las imágenes de sus giras habituales por diferentes estados, las cuales no canceló, lo muestran saludando efusivamente con besos y abrazos a su seguidores. Vale recordar que hasta ayer en la mañana México mostraba un total de 164 afectados.
China ha pasado de ser la mayor víctima de la pandemia a darle lecciones al mundo de cómo superarla y Corea del Sur ha logrado bajar considerablemente la tasa de mortalidad. ¿Cómo han hecho estos líderes asiáticos para frenar la mayor amenaza que ha tenido la humanidad en tiempos recientes? Ahora son los grandes asesores en la aplicación de las estrategias requeridas para contener los contagios.
Pero si gran parte del mundo se ha unido para enfrentar al coronavirus y tratar de frenar sus devastadores efectos como cobrar vidas, desacelerar el consumo, derribar los precios del crudo, disparar el dólar y derrumbar las bolsas de valores, Estados Unidos y China lo han tomado como una nueva fuente de tensión de la guerra política.
Pekín notificó el retiro de la credencial de prensa a periodistas de The New York Times, The Washington Post y Wall Street Jornal en reciprocidad a la orden de Washington de reducir las plantillas de medios oficiales chinos en Estados Unidos. Trump afirmó que se trata de un “ virus chino”. Si no los une la lucha contra el coronavirus, ¿quién los une?