El rifirrafe continúa y la incertidumbre crece, una vez más, en el mundo Cúcuta Deportivo. Ya no es sorpresa que a finales de temporada se presenten diferencias entre autoridades, hinchas, dirigentes, cuerpos técnicos y jugadores por el pobre desempeño del equipo.
Terminar el 2024 sin conseguir el ascenso a primera división se traduce en un nuevo fracaso para una hinchada constantemente golpeada y con poca –o nula- credibilidad hacia José Augusto Cadena, el máximo accionista.
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El club fronterizo entró en una nueva disputa con William Villamizar, gobernador de Norte de Santander, quien pidió hace un par de semanas que se considerara la venta del equipo, una opción de la que viene hablando desde hace varios años.
“Nosotros desde un principio intentamos comunicación para que se diera la posibilidad de vender el equipo y se pudiera dar la oportunidad para unos inversionistas que quieren tomar el equipo y darle el nombre que debe tener a nivel nacional e internacional. No obstante, no se obtuvo respuesta y sabíamos ya desde el principio del 2024 lo que iba a pasar, sabíamos que el Cúcuta Deportivo este año también iba a fracasar”, dijo el mandatario departamental.
‘No está en venta’
El equipo rompió el silencio a esta declaración el pasado jueves, cuando, por medio de un comunicado, le señaló a Villamizar que la institución no estaba en venta.
“Al gobernador de Norte de Santander, quien en repetidas ocasiones ha afirmado que hay un interés por adquirir el equipo, queremos expresarle que no hemos recibido una propuesta formal. Desde el club entendemos los ataques que hemos recibido en su posición de hincha. Sin embargo, en su rol de gobernador, quisiéramos invitarlo a brindar un apoyo real para nuestro proyecto deportivo”, comunicó el cuadro rojinegro.
El tema escaló y una vez más, así como en el primer semestre de 2017, se abrió la posibilidad de que el Cúcuta Deportivo marchara de la ciudad.
En el mismo comunicado difundido el jueves, el conjunto motilón enfatizó que no se ha contemplado esa posibilidad.
“La información que ha salido en diferentes medios de comunicación hablando sobre un cambio de sede para el Cúcuta Deportivo es totalmente falsa. En principio no es una posibilidad que hayamos contemplado al interior de nuestra institución”, aseguró el equipo.
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¿Negar el préstamo del estadio?
William Villamizar reaccionó al comunicado planteando la posibilidad de que no se prestara el estadio General Santander.
“He hablado con el alcalde Jorge Acevedo para que en lo posible no le prestemos el estadio al Cúcuta Deportivo el próximo año para que no nos siga haciendo quedar mal y en ridículo ante la comunidad nacional e internacional en materia deportiva”, declaró al ser consultado por diferentes medios de comunicación.
El máximo escenario del fútbol nortesantandereano, que urge de una gruesa inversión, es propiedad del departamento aunque fue entregado en comodato al Instituto Municipal para la Recreación y el Deporte (IMRD) de Cúcuta.
Ya hay un precedente
Tras terminar un penoso torneo de la B en 2016, Villamizar y César Rojas (exalcalde de Cúcuta) decidieron cerrar las puertas del ‘Coloso de Lleras’ para la campaña 2017, similar a lo que se está planteando en este momento.
El elenco motilón optó por irse a Zipaquirá (Cundinamarca) donde estuvo siete meses antes de que se llegaran a acuerdos que establecían diferentes cumplimientos económicos del club y un proyecto deportivo serio.
Villamizar y Cadena cedieron, concretando el regreso anunciado en el Concejo de Cúcuta.
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