El Instituto Politécnico Nacional (IPN) en México comprobó por medio de estudios moleculares la eliminación del Virus del Papiloma Humano (VPH) por medio de la terapia fotodinámica, una técnica no invasiva, con la cual trataron a 29 mujeres de Ciudad de México.

El hallazgo, refieren los medios mexicanos, también arrojó que con esta terapia también es posible eliminar las lesiones premalignas de cáncer de cérvix en su etapa inicial.

En el grupo de los investigadores, liderados por la científica Eva Ramón Gallegos, está el joven cucuteño Sergio Torres Pérez, de 26 años. Él es egresado de la Universidad Francisco de Paula Santander (UFPS) de la carrera de ingeniería biotecnológica, junto con Alina Fernanda Serrano Quintero, también colombiana.

Torres forma parte del laboratorio de citopatología ambiental del departamento de morfología de la escuela nacional de Ciencias Biológicas del IPN, al cual llegó hace dos años, luego de cumplir con una serie de pruebas exhaustivas del instituto.

Criado en el barrio La Cabrera, comuna 10 de Cúcuta, y egresado en el 2008 del colegio Sagrado Corazón de Jesús, asegura que formar parte de este grupo de investigadores es un privilegio para su formación profesional y social.

“Comprometerse con este tipo de investigaciones que tiene un gran impacto en lo social es maravilloso, y aún te sientes más motivado al ver y escuchar a las pacientes dando sus testimonios, porque tenían otras enfermedades que no tenían más alternativas. La terapia les dio la oportunidad de quedar libre de la enfermedad de forma segura sin efectos secundarios”, dijo.

La terapia

La investigadora mexicana Ramón Gallegos explicó a la Agencia Mexicana de Noticias que en la fase clínica se trataron con la terapia  a 420 pacientes de Oaxaca y Veracruz, además de las 29 mujeres de Ciudad de México. Estas presentaron VPH, lesiones premalignas en el cérvix o ambas. 

La técnica consiste en aplicar en el cuello del útero el fármaco (ácido delta aminolevulínico), que luego de cuatro horas se transforma en una sustancia química fluorescente que se acumula en las células dañadas, esto permite eliminar por medio de un rayo láser especial las estructuras impregnadas con ésta.

“En la primera parte de la investigación el tratamiento fue aplicado en tres ocasiones con un intervalo de 48 horas cada una, con un tiempo de radiación acorde a cada caso y tipo de lesión. Los resultados arrojaron que las mujeres que solo tenían el virus sin lesiones, se eliminó el VHP en 85 por ciento”, indica el instituto.

El comunicado del IPN precisa que en el caso de las mujeres de la Ciudad de México, se les aplicó el doble de la concentración del fármaco. El tratamiento se hizo en dos ocasiones con intervalo de 48 horas. En este grupo se logró eliminar el VPH en 100 por ciento de las pacientes que lo portaban sin tener lesiones, 64,3 por ciento en las mujeres con VPH y lesiones, y 57,2 por ciento en quienes presentaban lesiones sin VPH.

El investigador cucuteño explica que ahora sigue la continuidad de los estudios clínicos y para ello se requiere aumentar la muestra, es decir, incrementar el número de pacientes a las cuales se les debe aplicar la técnica, para obtener unos resultados más robustos.

“Para ello se necesita una ampliación de la infraestructura para atender a más pacientes, y en eso se encuentra trabajando la directora para lograr adecuar los espacios, y atender estas pacientes que ya están llegando a recibir este tratamiento”, explica. 

Estudio novedoso

(El equipo está dirigido por la científica Eva Ramón (centro).)

El ingeniero biotecnólogo, actualmente, está cursando un doctorado y desarrolla un estudio sobre la implementación de unas nanopartículas para el tratamiento contra el cáncer de mama. “Estamos utilizando esas nanopartículas como vehículo para ser más específica y eficiente la quimioterapia, en particular, en el cáncer de mama triple negativo”.

Esta técnica, llamada nanofármacos, consiste en desarrollar estas partículas, que son del tamaño de los virus, es decir, por el orden de una millonésima de metro.

“Estas tienen unas características que mejoran las propiedades de los fármacos y de esta forma los hacen más efectivos contra esta enfermedad”, detalló.

El estudio se encuentra en la etapa de ensayo in vitro, es decir, que están en el proceso de prueba de células en cultivo, pero están en proceso para comenzar el proyecto para evaluar la técnica aplicada en ratones.

Torres está desarrollando está investigación desde que entró en la maestría del instituto. 

No es imposible 

El interés por la investigación lo hizo pensar en el IPN, donde obtuvo la maestría bajo la dirección de Ramón. Su entrada al instituto fue en el 2015, fecha en la que presentó las pruebas de admisión, debido a que son programas con un padrón de alta calidad.

“Los estudiantes seleccionados son aquellos con más vocación y talento hacia la investigación. Este es un proceso un poco complicado, pero no imposible. Para nosotros como estudiantes de Colombia es una oportunidad única, donde podemos desarrollarnos como profesionales en áreas del conocimiento de gran impacto social”, dijo.

En el Instituto Politécnico Nacional de México hay otros colombianos que, al igual que Torres, desarrollan sus estudios de especialización en distintas áreas del conocimiento.  

Este joven tiene una beca, que son otorgadas a los posgrados de alta calidad, a través de la cual recibe un sueldo mensual para la manutención, permitiendo de esta manera dedicarse el 100 por ciento a la investigación que desarrolla en la institución. 

Sostiene la importancia de que la juventud colombiana se dedique a estudiar. “Es en este campo donde vamos a alcanzar superarnos como sociedad y avancemos en todas las áreas del conocimiento. Solo hace falta voluntad, perseverancia y superación”, enfatizó el joven cucuteño. 

Avances desde Valle del Cauca

La epidemióloga Nubia Muñoz, nominada al Nobel de Medicina en 2008, es una de las pioneras en los estudios y avances en el mundo contra el Virus del Papiloma Humano (VPH). 

Ella estableció la relación epidemiológica entre el virus y el cáncer de cuello uterino. Los estudios desarrollados por Muñoz han contribuido como un catalizador para el desarrollo de vacunas en todo el mundo. 

La vallecaucana estudió medicina en la Universidad del Valle, especializándose en patología. En Estados Unidos, en la Universidad de Johns Hopkins logró sus estudios de posgrado en epidemiología y virología. 

Muñoz se residenció en Francia, donde trabajó en la Agencia de Investigación sobre el cáncer, y es catedrática del Instituto de Cancerología de Colombia. 

La especialista ha publicado más de 330 artículos científicos en revistas de reconocimiento en el mundo de la medicina.