Aunque el Tribunal Administrativo de Cundinamarca había ordenado aplazar las manifestaciones convocadas por cuenta del paro nacional, esto no fue impedimento para que los colombianos salieran ayer a las calles a alzar su voz de protesta en contra de la reforma tributaria que plantea implementar el Gobierno Nacional en el país.
En Cúcuta, desde las 8:00 a. m., centenares de personas se dieron cita en el parque Simón Bolívar (barrio Colsag) para adelantar la protesta pacífica que contó con el acompañamiento de la Policía Nacional y la Defensoría del Pueblo.
La Central Unitaria de Trabajadores (CUT), la Asociación Sindical de Institutores Nortesantandereanos (Asinort), la Asociación Sindical de Trabajadores de Aseo (Asintracol), la Asociación Nacional de Trabajadores Hospitalarios de Colombia (Anthoc), agremiaciones de pensionados, mujeres y vendedores informales, así como representantes de la comunidad LGBTIQ, del sector judicial y líderes comunales, entre otros, participaron activamente de la manifestación.
En la mañana, durante más de 3 horas, los ciudadanos se movilizaron por distintos puntos de la capital como la avenida Gran Colombia, la avenida Cero y El Centro hasta llegar al parque Santander, donde finalizó la movilización.
“Nos manifestamos porque rechazamos el ‘paquete de Duque’. Esta reforma tributaria estando en un estado de calamidad nos atropella a todos los colombianos. Exigimos que no se firme ahorita mismo la reforma tributaria, que dejen eso en paz, porque como vendedores informales estamos en una crisis y el pueblo no aguanta más impuestos”, expresó Jorge Morales, presidente del sindicato de vendedores ambulantes e informales.
Desde Asinort le exigen al Gobierno Nacional que brinde las garantías para regresar a las aulas de clase de manera biosegura, porque mientras esto no suceda, no arriesgarán a la comunidad académica a un posible contagio de la COVID-19. Informaron que, en Norte de Santander, más de 60 docentes han fallecido y muchos han resultado contagiados.
Los jóvenes también protestaron
A las 2:00 de la tarde los hinchas del Cúcuta Deportivo se reunieron en la Plaza de Banderas para sumarse al paro nacional.
La popular Banda del Indio, además de mostrar su inconformismo por las recientes decisiones del Gobierno Nacional, aprovechó la ocasión para manifestarse contra los entes que controlan el fútbol profesional colombiano y las decisiones tomadas.
A pesar de que la manifestación transcurrió con total tranquilidad, algunas puertas de locales comerciales del centro de la ciudad fueron pintadas con grafitis alusivos al Cúcuta Deportivo. Varios establecimientos permanecieron cerrados por cuestiones de seguridad.
A las 4:30 de la tarde los estudiantes de varias universidades se reunieron en el parque Mercedes Ábrego.
Miles de jóvenes con carteles y banderas también salieron a las calles y se desplazaron hasta el sector de Natilán, en Atalaya. La marcha que transcurrió con tranquilidad, a pesar de los grafitis que también fueron pintados en varios puntos de la ciudad.
Pamplona le cumplió a la marcha
Para el educador y ejecutivo de la CUT, José Édgar Cañas Jaimes, Pamplona y los municipios de la provincia cumplieron con la participación en la marcha contra la reforma tributaria.
La jornada empezó desde el sector de la Institución Educativa José Antonio Galán, recorrió el Centro Histórico y terminó con proclamas en contra de las medidas y políticas económicas del presidente Iván Duque, en el quiosco del parque Águeda Gallardo.
En esta oportunidad asistieron a la convocatoria los sindicatos de trabajadores oficiales, universitarios, representantes de asociaciones, veedurías cívicas, defensores del medio ambiente, docentes, estudiantes universitarios, lideres comunales y amas de casa, entre otras personas descontentas.
“Podemos dar un balance positivo y los pamploneses se movilizaron de manera pacífica, demostrando que no están de acuerdo con el actuar del Gobierno Nacional”, dijo Cañas.
El líder sindical precisó que el proyecto de reforma tributaria es “nefasto” para el pueblo colombiano, en especial para las clases trabajadoras y los más humildes.
El docente explicó que, con las bases sindicales y la comunidad de la provincia, quedó el compromiso de seguir en lucha para evitar que la propuesta sea aprobada en el Congreso de la República.
Ocaña, con alteraciones del orden público
En medio de una pertinaz lluvia y con el uso de gases lacrimógenos, la Policía Nacional disolvió el bloqueo que unos jóvenes adelantaron en la interceptación de la avenida Francisco Fernández de Contreras con la circunvalar, en el municipio de Ocaña.
Los manifestantes llegaron a ese lugar a la 1:00 de la tarde, luego de participar en las marchas de las centrales obreras para sentar un precedente ante los dirigentes de la región y el presidente de la República por la reforma tributaria.
Mientras preparaban un ‘canelazo’ en el puente del barrio Las Llanadas para reponer energías, las autoridades intentaban persuadirlos de los riesgos de la aglomeración porque la red pública hospitalaria colapsó y fue declarada la alerta roja.
En medio de la fogosidad, los universitarios e integrantes de las barras de los distintos equipos organizaron los mecanismos para impedir la circulación de los vehículos.
Jesús Prada, líder juvenil, indicó que los dirigentes de la región y los gobernantes de turno deben entender la manera como sus actuaciones están asfixiando al pueblo.
“Más educación, menos corrupción. Debemos luchar por la verdadera transformación de la sociedad”, dijo Prada.
Portando banderas de Colombia y elevando arengas, señalaron que su protesta fue pacífica. Formaron una cadena humana para no permitir el ingreso de la tanqueta de la Policía Nacional
Funcionarios de la Defensoría del Pueblo, la Personería Municipal y los gestores de convivencia de la Secretaría de Gobierno, intentaron conciliar con los líderes, pero fue imposible y a las 3:30 p.m. se agotó la paciencia e impartieron la orden de entrar a la fuerza para despejar el paso nacional.
El Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) retiró la gigante bandera nacional y habilitó el tráfico vehicular hacia la capital del departamento.
El secretario de Gobierno, Yuri Carrascal, manifestó que se utilizaron todas las herramientas de conciliación para evitar actos vandálicos. A la postre, el hecho no pasó a mayores y todo regresó la normalidad.
Líderes sociales de la zona del Catatumbo solicitaron replantear las órdenes de fumigación de los cultivos de uso ilícito y reclaman el cumplimiento de los acuerdos de paz con una verdadera reforma agraria con proyectos alternativos.
