La escultura alusiva a la obra Columna Flor, del artista pamplonés Eduardo Ramírez Villamizar que se encuentra en el parque de la avenida Sexta, continúa motivo de controversia por su deterioro y porque es usada por habitantes de calle y viciosos para hacer sus necesidades fisiológicas.

Aunque las administraciones pasadas y la actual se han hecho uno que otro arreglo, el abandono del lugar hace que cualquier esfuerzo sea poco ante la creciente mendicidad que crece en la zona.

Alba Blanco, vendedora informal de la zona, contó la réplica se ha convertido en un baño de indigentes. Comentó que algunos comerciantes informales han lamentado la forma en que la escultura se ha venido acabando, pero nadie puede impedir porque “quien le dice algo a esa gente que casi siempre son personas que andan bajo los efecto de las drogas”, comentó.

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Hace alrededor de un año, recuerda, hubo un señor que llegó en una camioneta lujosa, se bajó y con su teléfono celular tomó algunas fotos de la obra. Hizo una llamada telefónica y al día siguiente, un equipo llegó y cambio las láminas de las bases que estaban completamente oxidada.  Sin embargo, solo fue en una parte de la estructura. 

Desde la Alcaldía de Cúcuta, se informó que por no tratarse de un patrimonio municipal, el mantenimiento no corresponde a la Secretaría de Cultura. 

Se trata de una estructura que se elaboró en la gestión de Donamaris Ramírez como alcalde. En otras administraciones le colocaron unos tirantes para estabilizarla. La actual administración le cambió las láminas en el año 2020 para reforzarla y esperan intervenirla en un proceso de renovación urbana.

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