Pero antes, en el minuto 11, una mala devolución de la defensa Laia Codina encontró adelantada a la portera Cata Coll y provocó el empate momentáneo (1-1).
España se rehízo pronto de aquel golpe y Alba Redondo pescó un cabezazo en el área para el 2-1 en el minuto 17, tras un centro de Ona Batlle desviado por Bonmatí.
Codina borró su error al marcar el 4-1 tras un tiro de esquina al minuto 45 y Jennifer Hermoso selló la goleada al 70.
El dominio español en el primer tiempo fue tal, que además de terminar el parcial con una ventaja de 4-1, Suiza no disparó ni una sola vez, logrando su tanto con ese gol en contra de España.
El partido se jugó en una fresca noche invernal (austral) en el Eden Park de Auckland, con más de 43.000 espectadores, que en su mayoría celebraron las anotaciones españolas.
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El técnico español Jorge Vilda dejó en banca a su jugadora estrella, Alexia Putellas, y apostó con tres atacantes, incluyendo a Alba Redondo y Esther González en la alineación titular junto a la veloz extrema Salma Paralluelo, iniciadora de la acción del primer gol español.
El técnico español defendió los cambios en la alineación al afirmar que "tengo a las 23 mejores jugadoras del mundo, la selección española es un equipo con las 23 mejores jugadoras del mundo".
Una de sus variantes fue la portera Cata Coll en lugar de Misa Rodríguez, su titular en la fase de grupos.
Festival español
España fue el claro dominador del partido contra un equipo suizo poco inspirado, con ocasionales descolgadas de Ramona Bachmann y Coumba Sow que eran fácilmente controladas por la zaga española.
La entrenadora de Suiza, Inka Grings, reconoció la superioridad española, a la que citó entre las favoritas del Mundial de Australia y Nueva Zelanda.
"Tenemos que darle el crédito al equipo de España, aprovecharon todas las oportunidades que pudieron tener", afirmó Grings.
Bonmatí volvió a asumir el rol de cerebro y motor de España, respaldada en las incursiones de las laterales Batlle y Oihane Hernández, y su actuación fue coronada con dos goles y una asistencia.
Suiza en el segundo tiempo logró cierto equilibrio en las acciones, pero le fue imposible remontar el abultado marcador.
Putellas ingresó al minuto 77 y Bonmatí salió, cediéndole su lugar como articuladora del juego español.
Japón impecable
En Wellington, Japón ratificó sus intenciones de llegar lejos en el Mundial femenino, un torneo que ganó en 2011, con su victoria contundente ante Noruega, otras de las favoritas, en un duelo entre campeonas del mundo.