Jefferson David Ríos Agudelo pensó que apuñalar a un hombre y luego enlistarse en el servicio militar sería su carta para evadir la justicia.
Pero su plan no salió como esperaba y las autoridades lo atraparon después de una investigación exhaustiva.
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Todo comenzó la madrugada del 14 de abril, cuando en la avenida 21 con autopista Atalaya, a la altura del sector Natilán, dos hombres protagonizaron un incidente violento.
Eran las 2:40 a.m., y el alcohol ya había empezado a hacer efecto en ambos. La víctima comenzó a discutir con Ríos Agudelo en un establecimiento comercial cercano.
Lo que empezó con un intercambio de palabras, subidas de tono, rápidamente escaló a una pelea física.
La confrontación fue contenida antes de que se saliera de control, pero Ríos Agudelo no se quedó tranquilo. Aunque se alejó del lugar en ese momento, no dejó atrás la ‘espinita’.
Poco después, según las autoridades, regresó al mismo sitio con un cuchillo en la mano. En un acto de agresión, apuñaló a la víctima en dos ocasiones, perforándole el pulmón y dejándola gravemente herida.
Tras el ataque, se dio a la fuga, desapareciendo. La víctima, herida de gravedad, fue trasladada de urgencia a un centro asistencial. Afortunadamente, recibió atención médica a tiempo y logró recuperarse satisfactoriamente.
Las autoridades no perdieron tiempo y comenzaron una investigación liderada por la Sijín de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc).
Los investigadores se pusieron manos a la obra: entrevistaron a la víctima, realizaron labores de vecindario, revisaron cámaras de seguridad y recopilaron todas las pruebas posibles para identificar al presunto agresor.
Para sorpresa de todos, Ríos Agudelo, de 21 años y oriundo de Lourdes, se había enlistado en el Ejército poco después del ataque.
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Esta nueva información complicó aún más la situación, pero no detuvo la búsqueda. Con las pruebas recopiladas, el 11 de septiembre se emitió una orden judicial en contra del joven por el delito de tentativa de homicidio.
Dos días después, a las 10:35 de la mañana, el soldado fue trasladado a la oficina de la Justicia Penal Militar y Policial, ubicada en las instalaciones del comando de la Policía Metropolitana.
Allí, las autoridades llevaron a cabo la lectura de derechos y, posteriormente, su captura. Después de su arresto, Ríos Agudelo fue presentado ante la Fiscalía.
Un juez, revisando el caso y considerando la gravedad de los hechos, dictó una medida de aseguramiento consistente en detención domiciliaria.
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