¿Se trató de un lío pasional, un problema personal o una extorsión? son por ahora las tres hipótesis en las que trabajan los investigadores del homicidio de Renzo Mauricio Martínez Galvis, quien fue baleado mientras atendía su local de comidas rápidas en el barrio Antonia Santos.

La víctima, de 47 años, que tenía su negocio en la esquina de la avenida 52 con calle 23, estuvo cerca de un año en este local antes de ser asesinado, pero tenía mucho más tiempo de experiencia en la venta de comidas, pues de acuerdo al desgarrador testimonio que su hija hizo público en redes sociales, él empezó vendiendo chorizos y con esfuerzo logró conseguir un alquiler y montar su restaurante.

“No podemos entender qué pasó, él era una persona humilde de corazón, noble, servicial (…) tuvo que sacrificar muchas cosas y venderlas para mantener el local. Ya no es posible emprender un negocio, o tal vez se equivocaron (sicarios) no sé, la verdad esto es muy duro”, dijo entre lágrimas la hija de Renzo Martínez.

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¿Qué pasó?

Lo único cierto, hasta el momento, es que el homicida, que llevaba una camisa negra y un pantalón azul, estaba acompañado de otro hombre. A las 8:30 de la noche del pasado martes arribaron al negocio de Renzo, con la excusa de hacer un pedido.

“Al parecer, solo el asesino descendió de la moto. Le hizo el pedido a la víctima y cuando estaba distraída, sacó un arma de fuego y le disparó en tres oportunidades. Una en el brazo y dos en la cabeza. Posteriormente, huyó del establecimiento con su cómplice”, explicó una fuente judicial.

La Policía Metropolitana de Cúcuta no duró mucho tiempo en llegar a la escena y a pesar de que varios familiares y conocidos de la víctima ya estaban en el negocio para tratar de auxiliarlo, Renzo Mauricio no logró resistir y falleció pocos minutos después del ataque.

Al lugar arribaron los investigadores de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brihno), acordonaron la calle para adelantar las pesquisas y buscar a algunos testigos del hecho.

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Según testimonios de la comunidad, justo en el momento en el que presentó el caso, al parecer, el local estaba vacío, sin embargo las autoridades consiguieron varias cámaras de seguridad que ya están siendo revisadas para identificar a los sicarios.

“Lo único que escuchamos fueron los tres tiros, ya cuando salimos Mauricio estaba ahí en el piso sin vida. Hubo mucha gente que se acercó mientras los policías hacían el levantamiento, la mayoría conocidos, porque él (víctima) fue muy colaborador, nunca lo vimos en problema y tenía una personalidad muy tranquila, todos estamos muy sorprendidos de su muerte”, dijo un vecino.

Las hipótesis

Hasta el momento y teniendo en cuenta que la víctima no tenía ninguna anotación judicial, las autoridades se encuentran analizando los tres principales motivos que puedan estar relacionados con su asesinato, y así mismo dar con el paradero de los asesinos.

Por un lado, de manera extraoficial, se conoció que Renzo Mauricio había establecido una relación amorosa no mucho tiempo atrás que podría estar relacionada con el hecho de sangre.

“Se conoció que la actual pareja del occiso, al parecer, estaría siendo víctima de extorsión por un local comercial que tiene, y su homicidio podría estar relacionado con el grupo delincuencial que está detrás del cobro”, dijo una fuente judicial.

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Por otro lado, se conoció que en el pasado, hace cuatro años aproximadamente, Renzo Mauricio había instaurado denuncias por el delito de lesiones personales que también están siendo estudiadas por los investigadores del caso.

“A pesar de que hayan pasado ya varios años de la denuncia, sabemos que hay bandidos que son muy pacientes, por lo que también es otra de las hipótesis que indagamos”, aseguró la fuente.

Y finalmente, podría tratarse de un hecho de sangre por no pagar alguna ‘vacuna’ por un grupo delincuencial del sector. “Mientras adelantaban las pesquisas del hecho, un familiar de la víctima gritó que Mauricio estaba siendo extorsionado, sin embargo, eso ya es la policía quien lo establecerá o no, yo la verdad no vi nada raro”, explicó uno de los vecinos.

Sin embargo, respecto a ésta última hipótesis, las autoridades aseguran que, a la fecha, la víctima no se había acercado al Gaula de la Policía para instaurar alguna denuncia por extorsión.

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