Antony Manuel Cano Laguado está acostumbrado a tener líos con la justicia. Así quedó demostrado cuando la mañana del miércoles cometió al menos dos atracos en el barrio La Concordia, intimidando a sus víctimas con una pistola cargada con diez balas.
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Pero en medio de los patrullajes de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc), un grupo de uniformados lograron frustrar uno de los hechos y detuvieron al presunto atracador.
Una de las víctimas fue Jefferson Jaimes Chía, quien es hermano del abogado penalista José Ernesto Jaimes Chía, quien también es líder comunal y director de la fundación ‘Jaimes Chía trabajando para la Comunidad’.
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Según se conoció, Jefferson, quien trabaja como investigador judicial y criminalista en dicha fundación, se percató de que un hombre sospechoso lo perseguía en una motocicleta marca Suzuki GN, mientras que él también transitaba en otra moto, por lo que decidió parquearse en la calle 35 con avenida 2, de La Concordia, para desayunar en esa esquina y así perderle el rastro al presunto ladrón.
Sin embargo, de repente el presunto delincuente arribó al lugar y de inmediato estacionó su motocicleta, sacó la pistola y lanzó una amenaza a Jaimes Chía, en la que le aseguró que “ahora sí no se va a salvar”.
Mientras la víctima estaba siendo intimidada con el arma, dos policías que pasaban por el lugar, se percataron de la escena, cuando el asaltante intentaba quitarle una cadena, por lo que interceptaron al sospechoso y lo detuvieron, poniéndole las esposas.