Las tensiones entre el presidente Joe Biden y el expresidente Donald Trump han venido aumentando en los últimos días, esta vez sus desacuerdos son sobre cuestiones raciales y el futuro de la Corte Suprema de Justicia. Mientras, ambos se preparan para lo que se anticipa como uno de los debates presidenciales más importantes de los últimos años.
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Este fin de semana, la campaña presidencial de 2024 ha desplazado su enfoque de los tribunales y los juicios de Trump y el hijo de Biden, hacia los debates políticos convencionales. Ambos candidatos están poniendo un énfasis particular en captar el voto de la población afro y la población migrante, una base de poder tradicionalmente demócrata en la que Trump intenta ganar terreno a pesar de su falta de popularidad y controversia en temas de minorías.
El presidente Biden viene afilando su discurso en contra de el condenado expresidente, esta vez en un evento de recaudación de fondos en Hollywood, expresó su preocupación por la posibilidad de que Trump, en caso de ganar un segundo mandato, podría nombrar más jueces conservadores de línea dura para la Corte Suprema. Este escenario, según Biden, representa una de las amenazas más alarmantes de un posible regreso de Trump a la Casa Blanca, pues podría endurecen mucho más las políticas contra algunas minorías. El expresidente Barack Obama, quien se unió a Biden en el evento, criticó a los republicanos por apoyar a un candidato que ha sido “condenado por 34 cargos”.
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En medio de una contienda que solidificar a grupos específicos de votantes, y en un esfuerzo por movilizar a los votantes latinos y jóvenes, Biden lanzó un video en “spanglish” donde varios “dreamers”, como le llaman a los migrantes que se radican en Estados Unidos, critican a Trump y alaban al actual presidente por su compromiso con el programa DACA (Acción Diferida para los Llegados en la Infancia). Este programa, iniciado por Obama en 2012, permite a los jóvenes migrantes vivir y trabajar legalmente en Estados Unidos. Los “dreamers” en el video califican a Trump de cobarde por sus intentos de acabar con DACA y por sus comentarios despectivos hacia los migrantes.
Trump, a pesar de ser conocido por su discurso antimigrante, ha cambiado un poco su estrategia y lanzó recientemente la campaña “Latinoamericanos por Trump” en un intento por atraer el voto latino. Sin embargo, ha sido duramente criticado luego de que en un mitin en Las Vegas, se le escuchó diciendo a modo de burla, “No me importas, solo quiero tu voto”.
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Durante su mandato, Trump intentó poner fin a la programa de migrantes DACA, alegando que era inconstitucional. En contraste, Biden, desde su llegada a la Casa Blanca en enero de 2021, ha instado al Congreso a encontrar una solución legislativa duradera para los “dreamers”. Desde el inicio del programa DACA, los Servicios de Ciudadanía e Inmigración han aprobado más de 800,000 solicitudes para migrantes.
Por ahora las campañas de Biden y Trump continúan enfocándose en los estados indecisos y en los grupos de votantes que podrían ser sus fichas claves en las elecciones. La campaña comenzó y ha intensificado su retórica entre los candidatos. Mientras Trump vuelve al juego con su antiguo slogan “Hacer a América grande de nuevo”, Biden busca solidificar las minorías mientras ataca a Trump por su radicalismo.
*Con información de El Colombiano.
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