Con un mensaje enfocado en el fortalecimiento de la familia como núcleo de la sociedad, el obispo de la diócesis de Ocaña, monseñor Orlando Olave, dio inicio a la tradicional novena navideña en el santuario del Agua de la Virgen. Este lugar es considerado sagrado por los habitantes de la región, pues alberga la imagen de la patrona de esta zona del país.
El alto prelado hizo un llamado contundente a los actores armados del conflicto para cesar la violencia como un verdadero gesto de paz y reconciliación. “Es necesario estrechar lazos de fraternidad entre los pueblos y buscar caminos de convivencia pacífica”, señaló monseñor Olave, quien recorrerá tanto sectores rurales como urbanos del Catatumbo para llevar su mensaje de esperanza.
Iluminación para el santuario: símbolo de unión
Durante la apertura de la novena, monseñor Olave agradeció a las empresas y personas que colaboraron en la iluminación de las escalinatas que conducen a la capilla en lo alto de la montaña. “Este lugar congrega familias enteras alrededor del pesebre para elevar sus plegarias al Niño Dios, pidiendo por la paz de Colombia”, destacó.
El santuario, rodeado por una exuberante zona boscosa, se convierte en un pulmón espiritual donde los visitantes pueden renovar su fe y reflexionar sobre los propósitos para el nuevo año.
La iluminación y las actividades en el santuario han contado con el apoyo de la gestora social, Silder Lorena Contreras Amaya, quien subrayó la importancia de trabajar unidos para consolidar los valores familiares. La primera dama afirmó que la novena de aguinaldo es una oportunidad para reflexionar sobre el rol de la comunidad en el desarrollo de la región.
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“Los campesinos de veredas como La Enllanada, San Pedro, San Agustín y La Samaritana participan activamente, fortaleciendo la integración cultural y espiritual. Es un momento para compartir en familia y revivir tradiciones”, aseguró Contreras.
Aguinaldos para los más pequeños
Gracias a la gestión de la DIAN y comerciantes locales, se entregaron zapatos, ropa y regalos a los niños que asistieron a la novena. El gobierno local continuará esta iniciativa hasta el 23 de diciembre, llevando alegría a sectores rurales y urbanos de Ocaña.
Además, se destacó el trabajo conjunto entre la diócesis, la alcaldía y otras entidades para iluminar el acceso al santuario de la Virgen de Torcoroma, un proyecto que había sido anhelado por años.
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El presidente de la Junta de Acción Comunal del corregimiento Agua de la Virgen, Andrés Mauricio Rodríguez Rueda, resaltó el impacto del alumbrado paisajístico y la organización de las actividades religiosas para el ecoturismo. “La romería desde las 4 de la madrugada por el sendero peatonal se ha convertido en una tradición que agradece los favores recibidos”, indicó.
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