Los Juegos de Río anuncian la próxima salida de los vuelos de Usain Bolt y Catherine Ibargüen. Despegarán en el Estadio Olímpico y nadie debe perdérselo pues promete espectáculo.
Para ambos, las eliminatorias del sábado fueron más bien una pasarela en la que lucieron atuendos y desplantes. El jamaiquino Bolt pidió que el público se callara antes de su heat y lo entusiasmó al ganar la carrera con holgura.
La colombiana Ibargüen lució unas medias color de rosa, por debajo de las rodillas, y no pidió silencio, sino que lo guardó ella misma ante la prensa que solicitaba sus declaraciones.
Seguramente quiere guardarse los comentarios para el momento del podio.
Así que a poner oídos atentos y a abrir bien los ojos el domingo, en una jornada que incluye mucha más actividad interesante, como la final del tenis, en que el argentino Juan Martín del Potro chocará con Andy Murray.
Enseguida, cinco motivos para seguir las competiciones:
La figura
Bolt podría coronarse tricampeón olímpico en los 100 metros, y pese a las dolencias de muslo que le han aquejado recientemente, asegura que llega en su mejor momento.
"Para mí, siempre se trata de ganar, por eso estoy aquí", sentenció después de su eliminatoria
Justin Gatlin luce como el mayor obstáculo que se interpone entre Bolt y la conquista de esa tercia de medallas doradas. El estadounidense finalizó las eliminatorias con el mejor tiempo del día, 10.01 segundos.
"Salí a hacer mi carrera en la primera ronda y sólo me interesó avanzar hasta la meta sin problemas", relató Gatlin.
La esperanza latinoamericana
Si hay dudas sobre la salud de Bolt, a Ibargüen se le volvió algo difusa el aura de invencibilidad que le rodeaba. En junio vio interrumpida su racha de 34 victorias seguidas, al caer ante la kazaja Olga Rypakova en una competición de la Liga de Diamante en Inglaterra.
Pero quizás eso haya servido como un toque de atención para la colombiana de 32 años.
"No me presiono, el sueño que quiero cumplir es ganar el oro, cumplirme, porque mis objetivos me los fijo yo", indicó la saltadora de Apartadó en declaraciones a medios de su país. "En Colombia, la gente es muy exigente y por eso me preparo siempre para ganar".
Ibargüen ha dado motivo a esas altas expectativas. Consiguió la plata en Londres y fue campeona en los mundiales de Moscú 2013 y Beijing 2015.
Lo emotivo
Juan Martín del Potro ha vencido ya a Novak Djokovic, a Rafael Nadal y a su historial de lesiones. Si derrota también a Andy Murray, se llevará de Río una medalla de oro que difícilmente alguien vaticinaba.
Tras una larguísima cadena de lesiones en las muñecas, el argentino luce como el tenista que ganó el US Open en 2009 y no como el eterno convaleciente de las canchas.
Ahora podrá probarse con otro grande.
"Es el logro más importante de mi carrera junto al US Open, incluso más", dijo Del Potro tras vencer a Nadal en semifinales, y aludiendo a la conquista de su único título de Grand Slam. "Lo que estoy viviendo es más grande que un sueño".
En boxeo, el colombiano Yuberjen Martínez choca por el oro con el uzbeco Hassanboy dusmatov. En semifinales de los ligeros, el cubano Lázaro Álvarez se mide al brasileño Robson Conceicao.
Para la historia
Se coronará el primer campeón olímpico de golf desde 1904 y podría ser latinoamericano.
El británico Justin Rose se anotó una ronda de 65 golpes, seis bajo par, y se apoderó el sábado del primer puesto con un acumulado de 201 impactos. El sueco Henrik Stenson está segundo, un tiro detrás
Pero el argentino Emiliano Grillo, quien perdió sus palos de golf camino a Río y los recuperó el lunes por la noche, tiene un acumulado de 207 impactos luego de las primeras tres rondas, para ubicarse en el cuarto puesto _en un triple empate con el estadounidense Bubba Watson y el sueco David Lingmerth.
El argentino de 23 años está a tres golpes del australiano Marcus Fraser, quien por ahora se haya en tercero y en posición de medalla de bronce.
Para los curiosos
En el maratón de mujeres que se realiza el domingo, competirán las trillizas Luik, nacidas en Estonia, Lily, Leila y Liina quieren hacer un buen papel. De paso, podrían confundir a alguna rival menos aventajada, quien se quedará pensando, ¿Acaso esa rubia no me había rebasado ya dos veces?