Los aguaceros que por varias semanas azotaron al sur de Norte de Santander han ocasionado pérdidas millonarias a productores agrícolas, especialmente a los cultivadores de duraznos, uno de los principales renglones de la economía de Cácota y de Chitagá.
“En la finca de propiedad de mi familia estamos hablando de más de $300 millones”, sostuvo Sulay Vera Pabón, representante de una de las empresas productoras de duraznos en la vereda Ícota (Cácota).
Ella señaló que la situación es generalizada entre aproximadamente 200 cultivadores de la fruta que se han visto afectados en un 80 por ciento de la productividad.
En la zona agrícola de los dos municipios hay 250 hectáreas cultivadas con duraznos, de las cuales el 50 por ciento están en cosecha y el resto en floración.
Para esta época se tenían en la región unas 200.000 toneladas para recolectar, que se han perdido en su mayoría.
Las afectaciones
Los daños están relacionados con pérdidas totales y parciales de los distritos de riego, plantaciones y tanques australianos.
“El río se nos llevó más de 200 matas. La floración se cayó y los duraznos que estaban por recoger con la lluvia se reventaron”, precisó Vera Pabón.
Para evitar problemas fitosanitarios en las plantaciones, periódicamente recolectan la fruta y la entierran. Esto también implica costos, por tanto deben responder por el pago de las 50 personas que trabajan de lunes a sábado.
Sin paso
De acuerdo con Vera Pabón las lluvias también los mantiene incomunicados y lo poco que cosechan no se puede vender.
La productora explicó que no pueden comunicarse con Pamplona porque la carretera está obstruida a la altura de la Estación Pulido e igualmente con Chitagá, debido a derrumbes ocasionados por las crecidas de las quebradas.
Para sacar los productos y cumplir con los clientes en diferentes zonas del país, contratan vehículos de doble tracción que toman la trocha del Uvito. Tienen que retirar escombros para después de dos horas llegar a Cácota, en donde pasan la carga a camiones de siete toneladas.
De ahí buscan la vía a Pamplona, lo que les implica triplicar esfuerzos humanos y hay un incremento en los fletes.
“Hemos tratado de hablar con las autoridades de estos municipios y con el Invías, pero nadie da soluciones”, expresó Vera Pabón.
Ella, en representación del gremio de productores solicitó a los alcaldes de Cácota, Ledin Gauta y de Chitagá Dikson Villamizar y al director territorial del Instituto Nacional de Vías, Jesús Vergel, que convoquen a una reunión y expliquen qué acciones están haciendo para habilitar la carretera Central del Norte.