La cita para la elección de la nueva mesa directiva de la Corporación Autónoma Regional para la Defensa de la Meseta de Bucaramanga, Cdmb, estuvo marcada por una protesta frente a las instalaciones en rechazo total al gobernador de Santander, Mauricio Aguilar.
El escándalo se desató luego de que alcaldes y diputados denunciaran que Aguilar, en complicidad del excontralor Fredy Anaya, quieren dejar sus fichas políticas en el tablero para ganar más poder dentro de esa corporación.
Frente a ese panorama, un grupo de personas enfurecidas esperaron al gobernador y al verlo llegar comenzaron a insultarlo y empujarlo, agrediendo todo su esquema de seguridad. Además, cuestionaron sus jugadas y pidieron una explicación a la cantidad de denuncias por la supuesta corrupción dentro del proceso.
Lea: Cúcuta y Norte de Santander estremecidos por los violentos
Con gritos y empujones, la comunidad también exigió un proceso limpio y transparente en esta elección del Consejo Directivo.
A todo esto se le suma que horas antes de iniciar el proceso de selección, el gobernador Aguilar suspendió de su cargo a la alcaldesa de Suratá, Ana Coronado, quien ya había denunciado constantes citas a reuniones por parte del gobernador para hablar. Al parecer, se trató de una estrategia para poner a un alcalde encargado, una de sus fichas, para alcanzar el control de la CMBD.
La Contraloría General de Santander le abrió tres investigaciones al mandatario a los pocos días de que se diera la elección del Consejo Directivo de la Cdmb.
Gracias por valorar La Opinión Digital. Suscríbete y disfruta de todos los contenidos y beneficios en: https://bit.ly/SuscripcionesLaOpinion