“Teníamos la esperanza de que estaba viva y que nos necesitaba. Esto es un sueño cumplido”, fue lo que dijo Viviana Villamizar Rubio, sobrina de Carmen Dionilde Rubio Quintero, la cucuteña de 56 años que había desaparecido hace 40 años y que ahora está de nuevo con toda su familia en Cúcuta.
El pasado miércoles 10 de octubre, fue publicada la historia de Carmen Dionilde, a quienes sus seres queridos buscaban desesperadamente, luego de que ella, siendo una adolecente de 16 años, dejara a sus padres y a sus 11 hermanos para irse a vivir a Venezuela.
Pasaron 40 años y los padres de Carmen Dionilde murieron con la tristeza de no volverla a ver. Sin embargo, los 11 hermanos decidieron intentar dar con ella y su familia.
Luego de la publicación hecha, la búsqueda de los familiares se extendió hasta Puerto Ordaz, Venezuela, lugar donde creían que estaba y a donde hicieron llegar a través de redes sociales la noticia.
“Yo empecé a publicar en cambalaches de allá sobre la búsqueda que estábamos haciendo de mi tía y dos personas me escribieron, pero una en especial, pertenecía a una fundación y fue la que nos ayudó a dar con ella. En un principio se asustó porque nadie sabía mucho de su familia y solo la conocían como Carmen; luego por Whatsapp logramos verla pero teníamos dudas porque estaba muy diferente aunque empezamos a hacerle preguntas y las respondía correctamente”, contó Viviana Villamizar.
Así las cosas, entre los casi 150 familiares que Carmen Dionilde tiene en Cúcuta, se pusieron en la tarea de reunir dinero para traerla de vuelta. Con pancartas de bienvenida, pitos y flores, la recibieron en la casa materna de los 11 hermanos.
“Lloramos mucho de la emoción. Cuando la abracé sentí como esa conexión especial, era como abrazar a mi nonita. Sé que la pudimos hallar gracias a gente muy colaboradora. Todos los que nos ayudaron fueron ángeles en el camino”, dijo Viviana Villamizar.
Y añadió: “Sabemos que a ella le cambió la vida volvernos a ver, porque precisamente hacía un mes, había perdido a una hija de 18 años, y que de paso estaba embarazada, por esa situación ella estaba muy mal y reencontrarnos fue su alivio”, narró Viviana.
Desde hace una semana la familia de Carmen Dionilde solo irradia dicha y felicidad. Por ahora, solo quieren disfrutar de su ser querido, quien llegó con 3 de los 12 hijos que tuvo.
“A ella y a sus hijos los recibimos por igual, son nuestra familia y estar juntos era lo que tanto anhelábamos. Esta Navidad tiene un tinte de felicidad, una sensación del deber cumplido, de unión y hermandad”, añadió la familiar.
(Con fiesta recibieron en el barrio Galán a Carmen Dionilde y sus hijos.)
La vida lejos de casa
Viviana Villamizar aseguró que su tía Carmen Dionilde les contó que la razón por la que no volvió a Cúcuta, se debía a que el hombre con el que se había ido cuando tenía 16 años no se lo permitió.
“El hombre le salió malo, la golpeaba y la manipulaba. Luego como se vinieron los hijos (8) ya la idea de volver no era opción, por eso hizo vida allá y poco a poco salió adelante sola, luego vinieron más hijos y nunca vio la manera de volver, aunque sí pensaba en que nosotros acá la estábamos buscando, por eso cuando llegó después de 3 días de viaje, la emoción de verla era de llanto y alegría”.
Redacción Q’hubo