De acuerdo con la información entregada por los habitantes de la zona, el incendio comenzó el pasado viernes 27 de enero en horas de la tarde entre los municipios de Chitagá y Silos, en Norte de Santander. Una vez se puso la situación en conocimiento de las autoridades municipales, fueron los habitantes de la zona quienes iniciaron las primeras labores para apagar las llamas. 

“La misma comunidad fue la que empezó a detener el fuego con todo el riesgo que eso implica. Hasta el sábado hizo presencia el grupo de bomberos cuando ya las afectaciones eran grandes”, dijo Bayron florez, líder social ubicado en la zona afectada. 

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De inmediato la alcaldía de Chitagá envió un oficio al área de Gestión del Riesgo de la Gobernación de Norte de Santander, solicitando ayuda de manera inmediata con el envío de un helicóptero tipo Bambi Bucket para detener las llamas, y reforzar el trabajo que venían realizando los campesinos y las unidades de bomberos por controlar el fuego. 

Emergencia ambiental

Una vez activado el Puesto de Mando Unificado para el control de la emergencia por parte de la alcaldía municipal de Chitagá, hicieron presencia en el lugar unidades de la Defensa Civil, Ejército y Policía, para coordinar las acciones de respuesta frente a la emergencia, constatando la gravedad de la situación, especialmente en las veredas La Rosa, La Hojancha, La Copa y Don Antonio, esta última donde al parecer inició la conflagración.

“Una vez evaluada la magnitud de la situación, se realizó la solicitud a la Consejería Departamental para la Gestión del Riesgo de Desastres para la activación de las entidades operativas del sistema de riesgos a nivel departamental. Al momento, se reporta una pérdida aproximada de 400 hectáreas de vegetación nativa; así mismo, las afectaciones se extienden aproximadamente a más de 200 familias de las veredas afectadas”, señaló la unidad de Gestión del Riesgo de Desastres en Norte de Santander. 

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Sin víctimas

 En diálogo con La Opinión, el alcalde de Chitagá, Jorge Rojas, dijo que no hubo víctimas mortales, sin embrago la pérdida ambiental fue bastante. “Se quemaron todas las mangueras y de estas cuatro veredas quedaron al menos cien familias sin agua, estamos buscando prontas soluciones. La extinción del fuego avanza favorablemente. Muchas gracias a los campesinos de las veredas que trabajaron día y noche evitando que creciera el fuego”, añadió el funcionario. 

Al tiempo que señaló que el Ejército de Bucaramanga fue enlistado para brindar apoyo en la zona de la emergencia, al igual que unidades de bomberos del municipio de Pamplona.

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Las causas

De acuerdo con las pesquisas realizadas, la posible causa de la conflagración corresponde a la acción involuntaria por parte de un campesino de la zona rural, quien prendió el fuego al parecer durante actividades agrícolas que posteriormente no pudo controlar. La alcaldía municipal de Chitagá igualmente confirmó que se va a comenzar una investigación con la autoridad ambiental para establecer los responsables y la causa real del incendio, pues de acuerdo con el decreto 100 de 2022, está prohibida en el municipio cualquier tipo de quema como fogatas, quemas agrícolas controladas, no controladas y cualquier otra actividad que genere incendios forestales poniendo en peligro la integridad de los habitantes. 

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