Luego de dos días, la conversación entre el comité del paro de los cocaleros del Catatumbo y el Gobierno nacional, solo quedó en una intento y la mesa se levantó sin que se concretaran avances, ni nuevos acuerdos.
Por la premura de la comitiva enviada por el Gobierno nacional, se pretendió simplificar la agenda de discusión establecida, y llevarla de siete puntos a tres: temas de vías, derechos humanos y sustitución del cultivo de uso ilícito; sin embargo, los representantes de las comunidades campesinas se mantuvieron firmes en la necesidad de abordar la agenda completa, por lo que el único acuerdo fue trasladar la mesa de discusión al territorio.
En este sentido, se programó una nueva sesión para los días 24 y 25 de junio al corregimiento La Gabarra, en Tibú.
“Esperamos que los delegados que vengan, tengan la capacidad de decidir y sobre todo comenzar a ejecutar”, dijo Olger Pérez, vocero de la Asociación por la Unidad Campesina del Catatumbo, Asuncat.
Pérez destacó avances en otros aspectos de la gran agenda que existe para el desarrollo del Catatumbo, como la aprobación de dos lanchas mecanizadas para el traslado de enfermos en el Río Catatumbo, además del avance en el desarrollo de las líneas productivas de la región para la transformación de café, cacao y lácteos; y también la estructuración de proyectos por parte de la Agencia Nacional de Tierras.
Sin embargo, en lo que tiene que ver con las necesidades de las familias cultivadoras de la hoja de coca, que fue el origen de la movilización y el llamado a paro, todavía no pasa nada.
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“Si no hay respuesta, estamos reiterando el mismo incumplimiento de otros gobiernos, desde (Juan Manuel) Santos, no hablemos de Iván Duque, porque ese sí que terminó de hacer trizas todo lo que se acordó en su momento en los Acuerdos de Paz, y bueno el reclamo es que se cumpla no hay más que decir”, apuntó César Jerez, vocero del Baluarte Nacional Campesino, quien viene haciendo acompañamiento al comité del paro.
Por su parte, el alcalde de Tibú, Richard Claro, manifestó que es preocupante para los municipios del Catatumbo que no se hayan registrado avances, luego de una jornada doble de trabajo.
¿En qué quedaron las ayudas?
El retraso en el cumplimiento de los acuerdos que se habían alcanzado, como las ayudas alimentarias a 5 mil familias y la inclusión de 2.040 muchachos al programa Jóvenes en Paz, ha sido atribuido al cambio en la Dirección de Sustitución de Cultivos Ilícitos, que vio el mes pasado la salida de Felipe Tascón por Gloria Miranda, frente al bajo índice de ejecución.
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La expectativa de las comunidades existe, pero mezclada con un poco de frustración, pues “hay muchos trámites, mucha burocracia y en parte de negligencia”, como indicó el vocero del Baluarte Nacional Campesino.
El ejemplo de esto, dice, es la entrega de las ayudas alimentarias, que consiste en una serie de mercados grandes para las familias con mayor vulnerabilidad, que debieron comenzar a recibir el beneficio en el mes de mayo, luego con los cambios gerenciales se les dijo que en junio y ahora deberán esperar hasta el 7 de julio.
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