Estamos a pocos días de escoger el alcalde de Cúcuta y gobernador, y con todas las lamentables noticias que hemos tenido que escuchar de episodios sucedidos a exalcaldes y al actual gobernador, hechos de corrupción nauseabundos y vergonzantes, no queda sino tratar de buscar el camino de la decencia con los candidatos que están inscritos, o de lo contrario, es como si estuvieramos condenados a vivir más de lo mismo en los próximos años. Cúcuta y Norte de Santander necesitan candidatos con grandeza, que no roben más, que no dilapiden más los recursos públicos, que “no anden por las nubes” como Yáñez. Por estos días quien ha tenido grandeza ha sido el periódico La Opinión al denunciar con entereza todos esos sucesos lamentables. La gente está hastiada.
Hay momentos en los que un país necesita la grandeza y el valor de algunos de sus líderes. De los últimos momentos de grandeza que recuerdo en Colombia – no son muchos -, la decisión del doctor Humberto de la Calle al renunciar a la vicepresidencia cuando ocurrió de parte de Samper el aprovechamiento de dineros del narcotráfico en su campaña. Ese ha sido un lastre moral del que aún no se recupera el país. Un acto de grandeza a nivel mundial, en Francia, cuando Charles de Gaulle hizo el llamado para liberar a su país de la ocupación : “Pretender que Francia pueda seguir siendo Francia bajo la bota de Hitler o el zapato de Mussolini es senilidad o bien traición”, decía De Gaulle.
Volviendo al tema de Cúcuta, el pasado viernes apareció la encuesta de CMI, realizada por el Centro Nacional de Consultoría en la que, sorpresivamente, aparece Leonardo Jácome en primer lugar con un 19%. Es decir, por lo menos por ahora, pareciera no afectarlo el traslado de Ramiro. En mi opinión sería lo peor que le podría suceder a la ciudad, en los que los días que se vuelva a administrar una ciudad por Skype desde una cárcel se volverían a repetir. En segundo lugar aparece en la encuesta Jorge Acevedo con un 17%; y en mi opinión, la sorpresa está en el tercer lugar con Juan Carlos García-Herreros. Digo la sorpresa, porque con el poco tiempo que lleva en campaña que aparezca en tercer lugar con un 9%, pareciera que Juan Carlos es el candidato que está recogiendo el hastío de la gente de ver como algunos ex alcaldes han aprovechado en su propio beneficio los dineros de la ciudad, y en los últimos días han sido objeto de la extinción de dominio. Merece especial reconocimiento el esfuerzo de Sergio Maldonado con quien he tenido oportunidad de hablar en dos oportunidades, joven candidato con buena preparación y proyección.
Por los lados de la gobernación se divulgó otro acto de corrupción, los contratos del “Faro del Catatumbo”. Que vergüenza, que decepción, no se cansan de dilapidar los recursos de un departamento que tiene múltiples y profundos problemas. El peor escenario que le podría suceder a Cúcuta y al departamento es que quedemos en manos de Jácome y William con todo lo que ello significa. Ojalá la campaña del General Mora tenga la fuerza para imponerse y lograr ese triunfo que tanto necesita el departamento.
Aunque la justicia ha tomado medidas tardíamente con la extinción de dominio y el traslado a la Picota, las noticias que vimos en estos días de como nuestros mandatarios se han burlado de Cúcuta y el departamento, de ver como se roban los dineros de todos, es lamentable que por estos días hemos sido noticia nacional pero por la corrupción, por la decepción y el engaño de nuestros mandatarios. Que vergüenza. Aún tenemos la oportunidad de tener un acto de grandeza por la ciudad y el departamento, y no permitamos que nuevamente los bandidos del erario público vuelvan al poder pronto, y nos hagan avergonzarnos de Cúcuta y la región. Tenemos gente decente que nos debe gobernar.