Estamos acercándonos a las elecciones de Alcaldes y Gobernadores de octubre próximo donde elegiremos nuestros gobernantes para los próximos cuatro años y por consiguiente es hora de comenzar a analizar en serio las múltiples opciones que en cada caso se pondrán a disposición de los votantes. Quisiera hacer algunas reflexiones que espero le ayuden a cada persona a escoger de la mejor manera por quién depositar su voto.
Uno, las elecciones regionales y locales no son una evaluación de la gestión del Gobierno Nacional; no se trata de apoyar o criticar la gestión del Gobierno nacional; cualquier Alcalde o Gobernador que elijamos deberá tener la obligación y la responsabilidad de adelantar políticas coordinadas con el Gobierno Nacional, dentro de las especificidades de su territorio.
Dos, por ello considero que en la selección de por quién votar deben primar criterios distintos a ser partidario o adversario del Gobierno Nacional. Elegir un Alcalde o Gobernador porque es ‘amigo’ o ‘adversario’ del Presidente es una equivocación mayúscula. Creo que los criterios para escoger cuál va a ser su candidato deberían ser: i) que sea una persona con una trayectoria de uso, manejo y respeto de los recursos públicos con seriedad; no pueden ser pasiones –odios o amores- los que definan, los que orienten las decisiones públicas; ii) debe comprometerse a gobernar para todos los habitantes de su territorio –municipio o departamento-, no para uno u otro grupo exclusivamente, por supuesto siempre es recomendable una especie de sesgo en favor de los sectores sociales más desfavorecidos –lo que algunos llamarían una discriminación positiva-; iii) una responsabilidad de rodearse de un buen equipo de colaboradores, con capacidades técnicas y ojalá administrativas, coordinar con el nivel regional –si se trata de alcaldes- y nacional las distintas políticas públicas, especialmente las que son responsabilidad de los niveles territoriales como son educación y salud, la convivencia y seguridad ciudadana tan sensible por estos días, en las ciudades las políticas de movilidad y transporte público y especialmente a una persona con capacidad y disposición para dialogar y escuchar a las personas y comunidades acerca de las necesidades ciudadanas.
Tres, creo que lo importante para escoger su candidato a apoyar para alcaldía o gobernación, no es si tiene un discurso de derecha, de izquierda o de centro, sino su trayectoria personal y política y su compromiso de hacer una buena gestión para todos los ciudadanos en su territorialidad.
Claro, un factor de exclusión, sin duda, es si se trata de candidatos que acudan a prácticas condenables como ofrecer privilegios por el voto –clientelismo-, o si insinúa o intentar ‘comprar’ el voto; ese candidato de ninguna manera debería ser elegido.
Por consiguiente, cada ciudadano responsablemente debería mirar en su circunscripción electoral por quién votará, y no hay duda que tendremos muchos y seguramente buenas opciones en cada territorio.
Adenda: Saludo con optimismo el nombramiento por el Presidente Petro del equipo negociador con las disidencias de las FARC, nombres como los del coordinador Camilo González Posso, Fabio Valencia, Gloria Quiceno, Pedro Arenas, Feliciano Valencia y los demás son garantía de una buena conducción de esa compleja negociación.