La posibilidad de negar el préstamo del estadio General Santander al Cúcuta Deportivo se descartó. Luego de que en diciembre surgiera esta opción, propuesta por William Villamizar, gobernador de Norte de Santander, la relación del equipo con las autoridades está en calma y las puertas del escenario no le serán cerradas.
El estadio, propiedad del departamento, es administrado por el Instituto Municipal para la Recreación y el Deporte (IMRD), entidad que está presta a continuar alquilando la plaza en esta temporada 2025 donde el elenco motilón disputará la penosa segunda división.
Lea aquí: Sabíamos que el Cúcuta Deportivo este año iba a fracasar: gobernador William Villamizar
Así lo contó el presidente de la institución rojinegra, Wilmar Sánchez, quien dialogó con La Opinión sobre la actualidad del equipo.
“Hemos tenido conversaciones con el IMRD, se expuso todo. Hemos hablado del contrato de alquiler para que todo muy claro y seguir con el préstamo como lo hemos hecho, cumpliendo con todas las obligaciones y pagos. Queremos tener un ambiente tranquilo y que todos sumemos. Seguimos acá”, declaró Sánchez, quien ya cumplió un año como presidente.
El director encargado del IMRD, William Correa, le aseguró a este medio que no hay ningún impedimento para negar este alquiler. Asimismo, dijo que la junta directiva del instituto revisará los incrementos necesarios en el costo de alquilar para este 2025.
Así las cosas quedó descartada esa opción que hizo recordar a lo sucedido en 2016, cuando por pésimos resultados deportivos, Villamizar y el exalcalde César Rojas optaron por cerrarle las puertas del General Santander al equipo del polémico José Augusto Cadena.
En aquella oportunidad, el fronterizo marchó para Zipaquirá donde estuvo los primeros siete meses de 2017 antes de retornar.
El gobernador, hace una semana, al ser consultado por el equipo, expresó que sentía tristeza por la actualidad.
“Triste por la situación del Cúcuta, no vemos cambios sustanciales, no vemos un equipo competitivo que nos vaya a traer satisfacción, pero no debemos ser aves de mal augurio. Esperemos, la gente trabaja”, señaló.