El Cúcuta Deportivo modelo 2018 todavía no está terminado. A diez días de su debut oficial, por la primera fecha del Torneo Águila ante el Deportes Quindío, la lista de jugadores sigue nutriéndose y el cuerpo técnico continúa en la búsqueda de las mejores piezas para que su nuevo equipo funcione como un ‘bólido’.

Esta semana llegaron tres jugadores más para sumarse al plantel que viene trabajando, con el nuevo cuerpo técnico, hace quince días.

El mediocampista Harrison Mancilla, procedente de Tigres FC; el volante Jáder Obrian, del Deportes Tolima; y el delantero paraguayo Roque Caballero, de Rionegro Águilas; son los nuevos hombres que tiene a disposición el estratega Lucas Pusineri para diagramar el menor once.

Caballero busca un resurgimiento

Se define él mismo como un delantero aguerrido, fuerte y capaz de pelear todos los balones con cualquier defensa, y así lo demuestra en los entrenamientos.

El atacante Roque Caballero, con 27 años de edad, llegó al Cúcuta Deportivo buscando alcanzar el brillante nivel que lo llevó a ser tentado hace dos años por tres de los clubes más grandes de Colombia.

Hoy sus derechos pertenecen a Rionegro Águilas, equipo con el que jugó diez partidos y marcó tres goles en el primer semestre de 2017. Para el segundo semestre del año fue prestado al Club Sportivo Trinidense, de Paraguay, en donde solo jugó dos partidos y no pudo anotar goles.

Ahora tendrá su oportunidad con el Cúcuta Deportivo, en donde espera ponerse a punto físicamente y pelear un lugar en el once titular.

“Estoy contento por llegar a un gran equipo como el Cúcuta, espero rendir al máximo para darle alegría a esta ciudad. Me recibieron bastante bien, los profes y los compañeros, es un grupo muy unido, estoy muy contento porque me encontré con un grupo que tiene deseos de salir adelante, de levantar una copa al final del campeonato y eso es lo que me motiva”, señaló ayer el ariete guaraní.

Caballero llegó en 2016 al Atlético Huila y se encontró con un gran momento de su carrera. Marcó cinco goles en las cinco primeras fechas de la Liga Águila, y dominó el escalafón de goleadores durante gran parte del campeonato colombiano.

Atlético Nacional, Santa Fe y Millonarios se fijaron en él, pero una lesión con el equipo opita le hizo sufrir un bajonazo en su nivel, y para 2017 fue adquirido por las Águilas de Rionegro.

Águilas lo cedió al Cúcuta por un año, pero su contrato tiene una cláusula para que regrese en junio, si su equipo lo requiere.

“Nunca le voy a negar al equipo la garra y la entrega en el campo de juego. Soy un nueve de área que lucha mucho por arriba, que sale a pivotear mucho, busco los espacios vacíos para que me puedan centrar el balón”, manifestó el delantero.

Por su parte, el mediocampista Jáder Obrian (22 años) es un futbolista habilidoso, rápido, que puede ser utilizado como salida por las bandas o como lateral.

Harrison Mancilla (26 años) es un volante de marca, fuerte y bastante rápido. Llega con continuidad pues el año pasado con Tigres tuvo 33 participaciones.