Este semillero de la compañía de artistas ‘La buena vibra’ es un grupo de adolescentes que busca hacer de su pasión por el teatro un quehacer profesional en Cúcuta, donde le apuestan a la creación, producción, investigación y circulación de productos teatrales.
Está conformado por diez artistas nortesantandereanos entre los 13 y 17 años de edad que llevan alrededor de cuatro años en el proceso de la actuación con pasión y entrega por lo que hacen.
Con su compromiso y disfrute de las artes escénicas, ya han puesto a disposición de los cucuteños una obra llamada “La Maestra” que fue estrenada en el teatro Clandestino en la avenida 0 #1N – 46 en el barrio Lleras Restrepo.
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Esta obra plantea el estallido de la violencia en el campo haciendo una denuncia popular, una incitación a la memoria y reflexión sobre la cotidianidad en Colombia. Este resultado es una pieza de la obra ‘Los papeles del infierno’ del dramaturgo colombiano Enrique Buenaventura que fue adaptada y dirigida por el profesor John Peñaloza para el semillero.
Los adolescentes que hacen parte de este semillero ven una oportunidad de poder llevar su pasión por el teatro a escenarios que pueden ser aprovechados por las familias de la ciudad, además de poder motivar a otros niños y jóvenes a poder ser parte de este mundo del arte y la cultura.
“Para mi llegar a ‘La buena vibra’ no ha sido solo entrar a una clase o academia de teatro. Ha sido conocer a nuevas personas, aprender e intentar nuevas cosas y darme cuenta que el teatro no es sólo un arte, sino una forma de descubrir qué somos y quiénes son los demás. Con ayuda de mis profesores y compañeros, esta experiencia ha sido una de las más divertidas y provechosas que he podido experimentar”, comentó Sofía Nava, integrante del semillero.
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Además, ser parte de ‘La buena vibra junior’, les ha permitido descubrir sus capacidades, cualidades y poder explorar al máximo sus habilidades poniéndolas en práctica a diario.
“Para mi llegar a ‘La buena vibra’, ha significado descubrir una habilidad que nunca imaginé tener y también a descubrir otra parte de mí, cuando empecé a actuar no me parecía tan emocionante y gracias a mis profesores, compañeros y las emociones que transmite el teatro, después de un año de hacer parte de este proyecto puedo decir que estoy fascinado con el arte de actuar y todo el esfuerzo y valor que se requiere para estar sobre un escenario”, expresó Jhon Pérez, integrante de ‘La buena vibra junior’.
Aun cuando muchos de estos adolescentes llevan mucho tiempo siendo parte del teatro, aseguran que todavía tienen nervios cada vez que se van a presentar, un sentimiento que siempre los acompañará por el hecho de presentar su talento a nuevas personas.
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“La buena vibra’ para mí, fue una oportunidad de usar un talento que jamás imaginé que tendría. Aunque este es mi segundo año haciendo parte de esta hermosa compañía de artistas, siempre hay nervios tras el telón y todo eso, pero de igual forma, es una experiencia hermosa la de poder transmitir un mensaje sobre todas las cosas que pasaron y hoy en día siguen pasando en el mundo, con nuestra obra ‘La Maestra’, dijo Nataly Moreno, quien pertenece al semillero.
En el mes de julio se hará la circulación de este proceso artístico en diferentes espacios y teatros de la ciudad de Cúcuta. También se están generando diálogos con la organización de la Comisión de la Verdad para abrir espacio de intervención a por medio de arte con esta puesta en escena.
Asimismo, ‘La buena vibra’, tiene las inscripciones abiertas en los talleres de formación para niños, niñas, adolescentes y adultos. Cuenta con un gran equipo de profesores y artistas; Vanessa Plata, Miguel Pacheco, Jota Olivares y John Peñaloza.
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