Desde el sábado pasado, la gasolina en Cúcuta y demás ciudades de Colombia subió $600, por lo que, en la capital de Norte de Santander, el galón de este combustible a precio subsidiado (exento) cuesta $13.025.

“Estas medidas pretenden disminuir el significativo impacto fiscal en el Gobierno nacional por la dinámica de los precios internacionales de los refinados, los cuales frente a los precios locales, en promedio, presentan aún una brecha significativa", explicó el Ministerio de Hacienda.

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Además, resaltó que “Colombia sigue teniendo uno de los precios de la gasolina más competitivos de América Latina”, ubicándose en el quinto lugar con la gasolina más barata ($14.564 en promedio), después de Uruguay ($30.108), Chile ($23.385), Perú ($22.061) y México ($17.531).

El ministerio recordó que, en el caso de no haber contado con la operación del Fondo de Estabilización de Precios de los Combustibles (FEPC), en lo corrido de 2023 el precio de la gasolina se hubiera ubicado, en promedio, en más de $2.450 por encima del precio de venta, es decir, en unos $17.000.

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Vale recordar que el déficit del FEPC en 2022 correspondió a $36,7 billones y se estima que en 2023 sea de $17,8 billones, del cual 77% correspondería a ACPM, cuyo precio promedio de venta al público a nivel nacional se mantiene sin ajustes en $9.065.

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