El temor reina en el municipio Pedro María Ureña, estado Táchira (Venezuela), tras la ola de violencia que se ha desatado en los últimos meses mediante atentados con granadas en diversos sectores comerciales.
Con el más reciente hecho de explosión de un artefacto, suman tres los atentados con granadas en la localidad del Táchira, limítrofe con el departamento Norte de Santander, durante los últimos cinco meses.
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Por este motivo, las ferias de Ureña han sido suspendidas, confirmó el alcalde de la jurisdicción, John Carrillo, quien expuso a La Opinión que los residentes están consternados por los acontecimientos violentos recientes que dejaron a ocho personas heridas.
“Lamentablemente, es parte de la cultura que nos ha tocado vivir todos estos años, y nuevamente se ha reavivado en el municipio”, comentó la autoridad local.
Expuso que las detonaciones de granadas pareciera ser el accionar que están ejerciendo grupos estructurados que se movilizan desde el territorio colombiano para sembrar terror y retomar la ola de extorsiones a los comerciantes y empresarios, presionándolos para que paguen sumas de dinero, a fin de que no les suceda lo mismo a lo ocurrido con los establecimientos que se han visto afectados.
Vale recordar que, el 22 de enero de 2023, seis personas resultaron lesionadas tras el estallido de una granada en la avenida Intercomunal de Ureña.
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El 6 de diciembre de 2022, una granada fue lanzada a una vivienda en el barrio Bonilla, por este atentado fue detenido alias ‘Leito’, a quien señalan como integrante de la banda La Línea.
Estos sucesos se han suscitado tras mensajes amenazantes que han circulado a través de las redes sociales de los ureñenses en donde mencionaron a comercios en específico; no obstante, el pool donde ocurrió el más reciente atentado no había sido mencionado en estos listados, los cuales eran adjudicados en un principio a las Autodefensas Unidas de Colombia y Venezuela (AUCV).
Sin embargo, las autoridades de la entidad demuestran no tener definido con exactitud el grupo armado que está detrás de estos hechos.
Es importante recordar que el municipio de Ureña a mediados del 2014 estuvo duramente acechado por organizaciones antagónicas como Los Rastrojos y Urabeños o Clan del Golfo, organizaciones que azotaron por mucho tiempo a comerciantes y habitantes de la zona, motivo por el cual se mantenían altos índices de asesinatos en la zona.
De acuerdo con testimonios de lugareños, un ambiente más tranquilo se comenzó a sentir desde mediados del 2020, cuando las organizaciones fueron desplazadas por el Eln., guerrilla que tomó mayor fuerza.
Anggy Polanco / Corresponsal La Opinión
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