La noche del lunes se tiñó de sangre en el barrio Simón Bolívar. Mientras la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) adelantaba operativos de control en algunos sectores de la ciudad, los sicarios estaban aprovechando el momento para cometer sus fechorías en el norte de la ciudad.
A las 9:30 p. m., un nuevo hecho de violencia se registró en la avenida 6 con calle 15, de ese barrio de la Comuna 6 de la capital nortesantandereana. Allí fueron asesinados dos hermanos: Jhon Jaiber Reyes Reina y un adolescente de 17 años.
“Los dos muchachos ya iban de camino al ranchito (vivienda), traían una carreta con chatarra y se sentaron en la esquina a pedirle agua a los vecinos. Mientras se tomaban el agüita fue que pasó eso”, contó una residente de ese humilde sector.
Según la comunidad, el crimen fue en cuestión de segundos. Al parecer, dos hombres que se movilizaban en una motocicleta, habrían sido los responsables del ataque a bala contra los hermanos.
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“Uno se quedó en la moto arriba, mientras que el otro bajaba la cuesta para matarlos. Se escucharon como nueve tiros. Aquí algunos vecinos salieron a la pata del que disparó, pero no fue posible alcanzarlo, porque se montó en la moto y se fue”, comentó una habitante de ese barrio.
Inmediatamente, alertaron a la Policía, quienes llagaron hasta el lugar y confirmaron la muerte de los hermanos, por lo que llamaron a la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) para que adelantaran el levantamiento de los cadáveres.
Según las autoridades, Jhon Reyes, también conocido como ‘Mechas’, tendría anotaciones judiciales por el delito de tráfico de estupefacientes (2022 y 2023).
“Estamos recolectando información con todas las personas que hay en el entorno para dar con los autores de este hecho”, aseguró el coronel Diego Díaz, comandante operativo de la Mecuc.
Los hermanos Reyes Reina
La comunidad lamentó la muerte de Jhon, de 30 años, y del menor de edad, pues los conocían por ser unas personas serviciales, que ayudaban a los vecinos cuando lo necesitaban.
“Ellos se la pasaban colaborándole a la gente, eran recicladores, pero lo que un vecino les pidiera, ellos lo hacían hasta por $500”, dijo la mamá de las víctimas.
Aunque la mujer reconoce que sus hijos eran consumidores de droga, aseguró que siempre fueron muy buenos con la familia y nunca le habían faltado el respeto a nadie.
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“Todos les dábamos consejos. Yo me enteré que consumían, pero cuando ya era muy tarde, era muy difícil dejar ese vicio. Intentamos ayudarlos, pero ya era la vida que habían escogido”, añadió la angustiada mamá.
Las hipótesis del hecho
Los familiares de las víctimas le contaron a La Opinión que los hermanos Reyes Reina habrían tenido un inconveniente con un vigilante informal de la zona quien, al parecer, los habría amenazado.
“Eso es un tema de envidia, ellos se criaron juntos, estudiaron con él, pero nunca los ha querido y ya antes los había corrido del barrio, porque no iba a responder por lo que pasara”, contó la mamá de las víctimas.
Asimismo, algunos residentes del barrio coincidieron en que el dueño de un predio en el que ellos “montaron su ranchito”, también les habría hecho alguna advertencia por ocupar un terreno ajeno.
“El señor como que les había dado un tiempo para que se fueran de ahí, incluso hace como tres días les había vuelto a decir que se largaran”, comentó una vecina de ese sector de Cúcuta.
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