Un hombre en una bicicleta sería el principal sospechoso del asesinato de Junior, un habitante de calle que fue ultimado con arma de fuego en la avenida 9 entre calles 6 y 7 del barrio El Llano cuando, al parecer, se encontraba consumiendo estupefacientes con otros dos habitantes de calle.
La víctima, de acuerdo a los testimonios de la comunidad, no era conocido en ese sector por los vecinos. Sin embargo, ellos mismos afirmaron que son tantos los consumidores de drogas en condición de calle que transitan, que cada vez aumenta la zozobra de ellos al salir de sus viviendas.
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“Es cada vez peor, ahora en el día que hay carros y gente se ven uno cada cinco minutos, ahora imagínese en la noche, ya hasta se montan a los árboles para robar los cables de luz, sacar el cobre y venderlo por unas monedas. Para nosotros la situación ya se está poniendo insostenible”, explicó uno de los comerciantes del sector.
Junior se encontraba en la esquina de una casa abandonada cuando, presuntamente, su homicida se acercó y con un solo disparo a la altura de la cabeza, lo atacó. Los dos acompañantes, debido al asombro huyeron del lugar, al igual que el criminal, quien siguió su camino con dirección al Canal Bogotá y desapareció.
Los vecinos de inmediato alertaron a la policía ese lunes a las 5:40 de la tarde. Una vez arribó la primera patrulla, comprobaron que la víctima todavía respiraba, por lo que lo subieron al vehículo policial y se trasladaron a la Unidad Básica de la Loma de Bolívar.
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“Pobre hombre, él quedó recostado a la pared mientras se desangraba. Cuando la policía lo alzó tuvieron que sostenerle la cabeza hacia arriba, porque se estaba como ahogando con la sangre. Me dio mucho pesar verlo así”, aseguró con tristeza una de las vecinas.
A pesar de los esfuerzos de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc), Junior falleció pocos minutos después de ingresar al centro de salud, a pesar de los esfuerzos de los especialistas de la salud.
Durante cerca de dos horas, en ese punto del centro de Cúcuta, varios uniformados estuvieron interrogando a los vecinos y habitantes de calle que estaban observando cómo adelantaban las pesquisas del hecho, tratando de conocer más sobre los móviles de este nuevo homicidio.