Las pesquisas que iniciaron Policía y Fiscalía contra una presunta red de narcotraficantes, les entregó detalles de los movimientos clandestinos de los integrantes de esta organización, que exportaba cocaína hacia Estados Unidos, a través de lanchas rápidas.
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Las autoridades empezaron a recopilar el material probatorio de esta estructura y así conocieron que desde Norte de Santander, Santander y Chocó, mantenían cultivos y laboratorios artesanales para producir pasta de coca, que luego era llevada hasta otros centros de producción en Urabá, donde finalmente se obtenía el cocaína, con apoyo del Clan del Golfo.
Una vez obtenida la sustancia, la organización la embarcaba en lanchas rápidas hacia países de Centroamérica con destino final a Estados Unidos.
Tras varios meses de investigación, entre la Dirección de Antinarcóticos de la Policía, en conjunto con agencias antidrogas de Estados Unidos, las autoridades identificaron a seis personas que se encargaban de mantener el imperio del narcotráfico para llevar cocaína al país norteamericano por toneladas.
Cuando un juzgado expidió las órdenes de captura contra estos presuntos narcotraficantes, los uniformados alistaron un operativo y se desplegaron en Medellín y Valdivia (Antioquia), Valledupar (Cesar) y Riosucio (Chocó), para detener a los integrantes de esta organización.
Entre los capturados está Galvis Correa de Ángel, alias Bolo o Flaco, quien sería el líder y principal financiador, propietario de plantaciones de coca y laboratorios clandestinos; Manuela Durango Ortiz, ‘La Mona’, la supuesta responsable de manejar los dineros y pagos a los transportadores.