La esposa de Anyer Emiro Guerrero Torrado pasó de la tristeza y las lágrimas, a la felicidad, luego de que el hombre fuera dejado en libertad bajo la figura de vencimiento de términos, tras haber sido detenido por unos soldados de la Fuerza de Tarea Vulcano cuando supuestamente le encontraron un paquete sospechoso dentro de su camioneta, en Tibú, el pasado 16 de julio.

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El hombre, de 26 años, recuperó su libertad, porque hubo una demora para que lo presentaran en las audiencias concentradas, sin embargo, él sigue vinculado al caso y deberá demostrar que no es el dueño de ese paquete que contenía cerca de un kilo de explosivo.

“En un principio pensamos que el contenido era base de coca, pero al ser analizado por expertos se confirmó que era amonal. El señor (Anyer Guerrero) indicó que la camioneta no era suya, que él transportaba solamente cosas en ese vehículo, quedó libre pero está vinculado a la investigación”, contó una fuente militar.

Ahora, la tarea de Anyer Guerrero será limpiar su nombre y demostrar que ese explosivo se lo habrían plantado y que él no tiene nada que ver con algún grupo armado que hace presencia en ese municipio del Catatumbo.

El general Ricardo Roque Salcedo, comandante del Comando Específico de Norte de Santander, indicó que la captura fue preventiva, por el explosivo hallado dentro de la camioneta.

Roque Salcedo también comentó que los militares no actuaron de manera arbitraria y en ningún momento se violaron los derechos humanos del detenido.

La detención

La celebración del cumpleaños de Anyer Guerrero terminó con su detención. El hecho se dio a las 7:00 p. m. de ese domingo, 16 de julio, cuando él se reunió con algunos familiares en el parque del barrio Villa Paz, de Tibú.

El grupo de personas, inicialmente, fue a comer en un negocio de Villa Paz, pero en ese momento un amigo de Anyer arribó hasta el establecimiento y los invitó a tomarse unas cervezas en el barrio Barco.

Ellos se fueron en la camioneta y llegaron a una cuadra donde hay un estanco, se hicieron al frente del negocio y se sentaron en el andén para tomarse unas cervezas. Minutos después un segundo amigo de Anyer Guerrero arribó al sitio y se hizo con ellos.

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Hacia las 9:30 p. m., pasaron cuatro tanquetas del Ejército por la cuadra, por lo que uno de los amigos de Anyer sacó su celular para grabar los vehículos, en ese momento unos soldados los abordaron.

Los militares, supuestamente, les gritaron a Anyer y a los dos hombres que estaban con él, les pidieron sus cédulas y los requisaron. Segundos después los soldados se quedaron con Guerrero y le pidieron que abriera su vehículo para revisarlo.

En medio de la revisión, uno de los uniformados encontró el paquete, a lo que Anyer Emiro les dijo de manera calmada que eso no era de él.

Momentos después, los militares fueron atacados por desconocidos, un teniente fue impactado en el  pecho y se salvó porque llevaba puesto un chaleco antibalas.

Una vez dejaron de sonar los disparos, tres soldados se llevaron de manera violenta a Anyer Guerrero, por lo que su esposa reaccionó y corrió hacia ellos, pero, supuestamente, uno de los militares le apuntó con un arma e hizo tres disparos al aire, quedando aturdida.

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