El gran sueño de Ramiro Meneses en su adolescencia era tener su propia batería para seguir haciendo punk, la música que no solo marcó su juventud, sino que hoy en día sigue haciendo parte de su vida.
Nació en Medellín y creció en la comuna Nororiental, entre los barrios Moravia, Manrique y Aranjuez, calles por la que vendió EL COLOMBIANO. “La idea era recoger plata para la batería”, contó el actor y director en charla con este periódico.
Su vida dio un giro de 180 grados cuando Víctor Gaviria lo llamó a protagonizar la cinta “Rodrigo D. no futuro”, producción de 1990, que reflejó gran parte de la violencia en Medellín en la década de los 80.
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Ese fue el punto de partida para Meneses, que nació el 9 de junio de 1970, saltará a la pantalla chica, donde ha tenido una exitosa carrera tanto como director como actor.
A su palmares en el cine, la televisión y el teatro, la noche del martes 12 de julio le agregó un éxito más: el mejor cocinero del reality “Master Chef Celebrity” del Canal RCN.
Victorino
Tras el impacto que tuvo la cinta “Rodrigo D., no futuro” que fue exhibida en el Festival de Cannes, Ramiro Meneses se radicó en Bogotá y comenzó su carrera como actor.
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Su primer rol fue en la serie juvenil “Décimo Grado”, donde interpretó a Ramiro, un adolescente rebelde, rockero, que iba en contra de las normas del colegio.
Su consolidación vino en 1991 con la serie “Cuando quiero llorar no lloro”, con el personaje de Victorino Moya, una historia que fue toda una sensación en ese entonces, que narró la vida de tres hombres, que nacieron el mismo día y con el mismo nombre. Ramiro interpretó a un joven de clase baja que termina metido en el sicariato.
Luego de varios personajes con características en común: la violencia, la pobreza y la rebeldía, en 1992 mostró una faceta totalmente opuesta en la comedia “Vuelo Secreto”, donde personificó a Oswaldo, un entrometido e impertinente mensajero en una agencia de viajes, personaje que le permitió demostrar que sus condiciones actorales, más allá de personajes cargados de violencia o resentimiento.
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Desde entonces su nombre comenzó a aparecer en los créditos de las grandes telenovelas y series del país.
En 22 años que lleva en la pantalla suma 28 producciones en televisión como actor y 12 realizaciones como director.
Su más reciente aparición fue en el remake de “Café con aroma de mujer”, de 2021, donde interpretó a Carlos Mario Estrada, un narco que entra al negocio del café.
En el cine, ajusta 19 presencias en largometrajes. Ha estado en títulos como “Golpe de estadio”, ”Perder es cuestión de método” y “Perros”.
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