Nuevamente delincuentes ingresaron a la sede Simón Bolívar, escuela anexa al colegio Agustina Ferro de Ocaña, se llevaron el mercado para preparar los alimentos y algunos utensilios del restaurante escolar.
Los vándalos, al parecer, consumidores de alucinógenos, forzaron la chapa y rompieron vidrios para ingresar al plantel educativo dejando sin almuerzo a 113 menores de edad.
No es la primera vez que los ladrones empleando esta misma modalidad ingresan a la institución, afectando la educación de decenas de niños, en su mayoría de escasos recursos económicos.
De nada han valido los esfuerzos por evitar que situaciones como estas ocurran, el llamado es a la comunidad para que informe oportunamente sobre la presencia de personas sospechosas en los alrededores de la sede educativa, indicó Oscar Emilio Pallares León, rector de la institución.