Las fuertes precipitaciones de los últimos días encienden nuevamente las alarmas de una réplica del desastre natural en el sector El Tarrita, zona rural de Ábrego.
El pasado fin de semana muchos viajeros tuvieron serias dificultades a la hora de hacer transbordo debido a la alta sedimentación en la zona. Un puente artesanal fue arrastrado por la creciente y los labriegos del sector reactivaron el teleférico para remediar la situación.
Sin embargo, la gente en el desespero de un paso rápido se somete al peligro y desafiando el barrial paga los 5 mil pesos para seguir el viaje.
Los organismos de socorro advierten sobre los riesgos de transitar por ese paso peatonal porque la humedad y el agua pueden socavar las estructuras. “Ellos se idearon un mecanismo artesanal con unas guayas y una canasta para transportar a las personas, el sistema no es muy seguro, se les han hecho las recomendaciones, pero el afán de una salida pronta y rápida los lleva a exponer sus vidas”, afirmó el comandante del Cuerpo de Bomberos de Ábrego, Yen Arias Arenas.
Los operarios, en tiempo récord, adecuaron otro pasadizo para el transporte de personas, maletas e incluso cargas de cebolla.
Las empresas transportadoras estudian la posibilidad de suspender esas maniobras por razones de seguridad de los pasajeros y ofrecen viajar por la ruta de Bucaramanga. Sin embargo, los habitantes de la zona no están dispuestos a pagar sobrecostos e indican que es una tortura mayor porque “llegan molidos”, al connotar el cansancio por el largo viaje.