Voceros cívicos de la región censuraron la actitud de inescrupulosos que están manchando los murales pintados en las paredes de algunos patrimonios culturales de Ocaña.
“La afrenta más dolorosa corresponde al atentado cometido a la memoria de José Eusebio Caro Ibáñez, donde los vándalos lanzaron elementos químicos al muro de la parte posterior del colegio que lleva su nombre y donde se meció la cuna del insigne poeta”, dijo el promotor cultural, Mario Castellanos Chinchilla.
El lamentable episodio se registró en plena zona cero del carnaval, sobre la calle 10 del Centro Histórico donde se tenía prohibido el uso de sustancias, espumas e incluso el derroche de agua potable.
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Se deterioró un trabajo ejecutado durante el Festival Nacional del Muralismo efectuado el año pasado con presencia de artistas de talla nacional e incluso internacional.