Asimilar el atroz asesinato de Gerson Wladimir Durán Angarita no ha sido fácil para sus familiares y amigos. Él era el menor de seis hermanos y hacía parte de una reconocida familia que tiene una empresa de transporte de carga. Él fue muy popular en gran parte de Cúcuta por haber sido extrovertido, amigable y rumbero, pues así lo describieron varios de sus allegados.

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Los fines de semana era muy común encontrárselo en alguna discoteca, fiestas clandestinas de remate o rumbas electrónicas que vienen organizando hace más de dos años en moteles de Cúcuta y Villa del Rosario o en fincas de la Recta Corozal, por los alrededores del peaje. A él le decían de cariño ‘Ratón’.

Siempre lo veían hablando con sus amigos, alegre y bailando con hermosas mujeres. En esas rumbas clandestinas jamás lo vieron involucrado en problemas o peleas, pues siempre prefería el festejo.

Pero su última rumba fue el pasado domingo 19 de febrero, cuando la noche prometía ser muy cálida y tranquila en Cúcuta y el área metropolitana, pues todo transcurría en calma y las unidades de la Policía Metropolitana (Mecuc) adelantaban sus patrullajes sin ninguna novedad. 

Pero hacia las 8:00 p. m., ese buen ambiente que había, se alteró tras conocerse que dentro de un motel de Villa del Rosario, por la Autopista Internacional, habían sonado varios disparos.

Una llamada que recibió la Mecuc alertaba sobre algo extraño dentro del motel La Kaskada, que está a menos de 300 metros del Templo Histórico, donde hay un CAI, por eso varios uniformados fueron enviados a verificar qué había sucedido, encontrándose con un hombre muerto.

En ese instante los policías no entendían qué había pasado, pero al pasar los minutos y averiguar con los empleados de ese establecimiento, se enteraron que desde el día anterior, en la cabaña N°13, se inició una rumba electrónica como solía suceder casi todos los fines de semana, pero con el homicidio la música se apagó abruptamente y los más de 50 asistentes salieron corriendo despavoridos.

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Las unidades de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) arribaron e iniciaron  la inspección técnica. En las diligencias judiciales se fueron conociendo muchos más detalles de lo sucedido y los videos grabados por las cámaras de seguridad les fueron dando más pistas a los investigadores.
 

Lo primero que pudieron establecer los peritos forenses es que el hombre asesinado a disparos era Efraín Jesús Pérez Díaz, a quien las autoridades lo tenían referenciado, porque supuestamente mantendría conexiones con algunos miembros del Tren de Aragua, lo que les llamó la atención a los investigadores, por eso decidieron ahondar mucho más en las pesquisas en ese momento.

Y fue así como se enteraron que tras el asesinato ocurrió el secuestro de un asistente a la rumba y que se trataba de Gerson Durán Angarita, de 40 años. En ese momento la situación era más crítica para las autoridades, pues quienes se llevaron a este hombre fueron dos acompañantes de Efraín Jesús.

En el motel quedó una moto Suzuki GN, de color negro y placa YYW-78F, además de una camioneta blindada, que, según testigos, pertenecerían a un hombre conocido con el alias de RR y a los integrantes del Tren de Aragua.

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¿Cómo fue el hecho?

Ante tal situación, miembros de la Sijín, Gaula Militar y Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) unieron esfuerzos para tener muchas más pistas de lo sucedido dentro del motel, pues no contaban sino con los videos y testimonios de los empleados del lugar.

El principal objetivo que se trazaron fue ubicar rápidamente a Durán Angarita, porque sospechaban que integrantes de la banda criminal Tren de Aragua se lo habían llevado, pero no tenían claro si era con fines extorsivos o en represalia por el crimen.

Lo primero que hicieron las autoridades fue tratar de ubicar el celular de Gerson Wladimir y por medio de un sistema especializado lograron establecer que la última vez que usaron el teléfono, esa noche, fue por el barrio El Salado.

De inmediato los investigadores comenzaron a analizar qué integrantes del Tren de Aragua residen por ese sector del norte de Cúcuta, sin tener ningún dato concluyente. Las horas transcurrieron y la angustia para la familia de Gerson Durán se agudizaba cada vez más.

Sin embargo, las autoridades comenzaron a tener más detalles, porque lograron ubicar a varios de los asistentes a la rumba. Lo primero que confirmaron es que Gerson Wladimir se salió de la cabaña donde estaba la música y en la entrada se quedó hablando con Efraín Pérez Díaz y otro hombre que conocerían con el alias de RR.

“Efraín y ‘RR’ estaban discutiendo, al parecer, por la venta de tussi en las fiestas electrónicas y Gerson al ver eso, se metió en la mitad y comenzó a decirles que se calmaran, que no dañaran la rumba, que más bien se unieran y trabajaran, para que ganaran más plata, pero de pronto ‘RR’ se volteó para irse, cuando Efraín lo agarró por el hombro y este sacó una pistola y le disparó varias veces hasta dejarlo sin vida, luego salió corriendo, otro pelado que estaba ahí en una moto lo ayudó a escapar”, contó un testigo del hecho, que por seguridad se reserva su identidad.

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Con las detonaciones, Gerson Durán quedó petrificado por unos segundos, luego corrió a su camioneta para irse rápidamente, pero con lo que no contaba era que Efraín Pérez estaba acompañado por otros dos hombres, que se encontraban afuera del motel consumiendo drogas.

Por eso cuando sonaron los tiros, los amigos del baleado también corrieron a ver qué había sucedido y al encontrar a Efraín muerto en el suelo, sacaron sus armas y también dispararon al aire, luego se lanzaron contra Gerson Wladimir y tras gritarle un par de groserías y preguntarle dónde estaba ‘RR’, se montaron en el vehículo y apuntándole a la cabeza, le indicaron que acelerara, porque se iba con ellos.
 

“Eso fue de locos, los manes esos le decían a ‘Ratón’ ¡mardito!, ¡mardito! ¿Dónde está ‘RR’? y como él les decía que no sabía, que se había ido corriendo, le dijeron que se iba con ellos, porque la iba a pagar’”, comentó el testigo del hecho.

Mientras esto sucedía, el resto de asistentes a la fiesta salieron asustados. Unos se subieron a los carros y motos, otros corrieron hacia la Autopista Internacional para subir a un taxi. Hasta quienes organizaron la rumba agarraron las mezcladoras de música y los bafles y huyeron.

Minutos después, el lugar quedó desolado. Cuando la primera patrulla de la Policía llegó solo encontró el cadáver y dentro de la cabaña había botellas de licor, agua y bolsas pequeñas en las que dosifican el tussi, que venden entre 50 mil y 80 mil pesos.

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Y es que varios asistentes a esas rumbas que se hacen en diferentes moteles de la ciudad y el área metropolitana, le contaron a La Opinión que quienes las organizan alquilan las cabañas o habitaciones más grandes, donde caben más de 30 personas y la promoción la hacen por medio de redes sociales. 

“Ellos pagan lo que cuesta cada cabaña, además, el motel cobra $10.000 por persona que entra, dejan vender licor, cerveza, agua o bebidas energizantes, pero donde está la mayor ganancia es en los jíbaros, porque ellos pagan la entrada y se dedican a vender tussi o cocaína. Nadie se los puede prohibir, porque siempre llegan con más gente y vienen armados, entonces ninguno se arriesga a ganarse un problema”, sostuvieron las fuentes extraoficiales.

Una fuente judicial señaló que, “quienes siempre manejan la venta de las drogas en las fiestas son tipos como ‘RR’, que cuentan con apoyo de sicarios o bandas, porque él tendría un sitio donde produce el tussi, pero también está el Tren de Aragua, que, según nos han contado, Efraín (al que mataron) fue designado para manejar ese negocio, pues se sabe que al otro lado de la frontera están produciendo esa droga en gran cantidad y quieren dominar toda la comercialización, por eso era la pelea entre ellos dos”.

Además, las autoridades también conocieron que la pelea entre ‘RR’ y Efraín venía desde hacía unos meses, pues ya habían tenido un encuentro, donde se amenazaron, por eso, el pasado domingo cuando se volvieron a ver las caras, estaban armados.

“Ese día, Efraín estaba rumbeando en el motel, pero en la tarde se fue para la casa, porque dijo que ya estaba cansado, cuando al rato llegó ‘RR’, parece que alguien le aviso a Efraín y en la noche llegó en una camioneta con dos hombres más, esos eran del Tren del Aragua, porque ya los habíamos visto y sabíamos quiénes eran. Ahí varios dijimos que se iba a armar una bronca. Y así fue”, manifestó otro de los asistentes a esa fiesta clandestina.

Un día ‘gris’

El lunes (20 de febrero), después de once horas de haberse dado el homicidio y secuestro, la Policía recibió una llamada que alertaba que en una trocha del sector Caño Picho, detrás de la Penitenciaría de Cúcuta, abandonaron una camioneta blanca de marca Toyota Rav 4 y de placas EMV-963.

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Unidades de la Sijín y CTI de inmediato se trasladaron a ese sitio y confirmaron que se trataba del vehículo de Gerson Durán. Según versiones, dos hombres lo abandonaron en ese lugar hacia las 2:00 de la madrugada, pero antes de irse, hicieron varios disparos, lo que provocó pánico y nadie se arriesgó a llamar a las autoridades.

Por eso, hacia las 7:00 de la mañana, cuando alertaron a la Policía varios investigadores así como familiares de Durán Angarita arribaron al lugar y luego de inspeccionarlo, no encontraron ningún rastro que los pudiera conducir a él.

Pero mientras los investigadores del CTI, Policía y Gaula Militar no paraban de recorrer gran parte de la Comuna 6 de Cúcuta, especialmente a la salida hacia Puerto Santander y alrededores de la cárcel, tratando de ubicar el sitio donde tenían a Gerson Wladimir, la familia vivía momentos de desesperación en su casa, pues los delincuentes se contactaron desde el celular de la víctima a un pariente por una video llamada.

En la comunicación los familiares pudieron ver a Gerson, quien les comenzó a rogar que lo ayudaran, que lograran a ubicar a ‘RR’ para que se entregara y así no lo mataran a él. Pero luego de unos segundos, uno de los captores les indicó que debían pagar $20 millones para volverlo a ver con vida.

La familia ante tal angustia decidió pagar el dinero, sin decirles nada a las autoridades, pues los criminales les dijeron que si sabían que la Policía o Fiscalía se enteraban de la llamada, matarían a Gerson.

Pero las horas pasaron y los presuntos integrantes del Tren de Aragua nunca soltaron a la víctima. Mientras la familia Duran Angarita vivía un calvario esperando alguna noticia del paradero de Gerson, los criminales preparaban todo para asesinarlo.

Según versiones, los secuestradores también le hicieron otras dos videos llamada a personas cercanas a ‘RR’, que conocían a Gerson Durán, donde lanzaban amenazas de muerte y mostraban a la víctima totalmente asustada.

Finalmente, en la tarde del pasado lunes, según han podido concluir las autoridades, terminaron matando al empresario del transporte de carga y luego de descuartizarlo, lo metieron en una maleta de color rosado.

“Primero nos dijeron que la maleta la transportaron dos hombres en una moto, la madrugada del martes (21 de febrero), dejándola tirada en un rastrojo de la parte alta del barrio Cumbres del Norte, pero luego de hacer unos análisis y averiguaciones, los asesinos usaron un taxi”, señaló una fuente judicial.

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Añadió: “también hemos podido establecer que en ese sector hay una mujer a la que apodan como ‘La Negra’, ella tiene el control de gran parte de las ‘ollas’ de la Comuna 6 y delinque para el Tren de Aragua, y a Gerson Durán lo habrían llevado a una de las casas que ella tiene allá y sería donde lo mataron y descuartizaron, pues siempre creyeron que él ayudó a matar a Efraín y no fue así, él solo quiso evitar que eso pasara”.

Según se conoció extraoficialmente, ‘La Negra’ era muy amiga de Efraín y a los dos les habrían ordenado tener el control de la venta de tussi en la ciudad, por eso con la muerte de él dentro del motel, las cosas se caldearon.

Durante toda esta semana un grupo de investigadores ha estado rastreando a ‘La Negra’ y a los otros hombres que se llevaron a Durán Angarita, pero no han contado con suerte, pues luego de allanar varias residencias, no los han encontrado, pero se espera que en los próximos días capturen a varios integrantes de esa organización criminal que participaron en el macabro hecho.

El hallazgo de la maleta

A las 11:00 de la mañana del martes, algunos habitantes del barrio Cumbres del Norte se percataron de que en una de las calles polvorientas de este sector montañoso había una maleta rosada y de ella salían rastros de sangre. De inmediato alertaron a la Policía para que arribara al lugar.

Cuando los uniformados abrieron la maleta encontraron un cadáver desmembrado, por lo que pidieron que miembros de la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) se encargaran de la inspección y el levantamiento.

La comparación de una foto de Durán con el rostro del cadáver descuartizado dio fuertes indicios de que se trataba de él. Luego de que los familiares lo observaron, también ratificaron que era su ser querido. 

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