Si bien el 2023 ha traído enormes desafíos para la economía colombiana, debido a los números rojos que ha dejado la inflación, las altas tasas de interés y otros indicadores, todo parece indicar que el nuevo año traerá vientos de recuperación para el país.

Según un reciente informe del BBVA Research, se espera que el crecimiento económico de Colombia se ubique en 1,2% este año y crezca hasta en un 1,5 % en 2024. Asimismo, se estima que el consumo privado pasará del 0,5 % al 1,8 % el próximo año, lo que genera expectativa entre las compañías, ya que esto les permitirá robustecer su operación y fortalecer componentes como el tecnológico, el cual demanda gran atención en áreas de logística, abastecimiento, entre otras.

Para Oskar Sarquis, CEO de Suplos, empresa colombiana y creadora de una plataforma de supply chain y factoring digital, “la recuperación gradual de la economía en Colombia traerá consigo grandes retos para los negocios en materia de adopción tecnológica, en especial en sectores como alimentos, retail, farmacéutico y petróleo, donde aún falta consolidar una madurez digital de sus operaciones, principalmente alineadas a su cadena de suministro”.

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Sin embargo, ¿cuáles serán esas tendencias de supply chain que mayor relevancia tendrán entre las empresas en el 2024 y que potenciarán el crecimiento de estas industrias? Sarquis expone:

1. Mayor automatización de tareas: Las empresas enfocarán sus esfuerzos en transformar digitalmente sus operaciones para disminuir la carga operativa y alcanzar objetivos corporativos.
2. Soluciones ‘tech’ para la búsqueda y fortalecimiento de la red local de proveedores: Las áreas de compras buscarán soluciones que les permitan tener un registro autogestionado, ágil y automatizado de la información de los proveedores, así como conseguir un acceso rápido a su base de datos de aliados que suplan las diferentes necesidades de bienes y servicios.
3. Inversión en tecnología end-to-end: Las empresas buscarán mayor visibilidad de lo que sucede en cada etapa de la cadena de suministro, por lo que buscarán herramientas que permitan un control de punta a punta para minimizar los riesgos por disrupciones y simplificar el intercambio de información con otros actores clave.
4. E-commerce B2B: Los e-commerce hacia clientes (B2C) sin duda están consolidados, sin embargo, en los próximos años se verá un fortalecimiento de los e-commerce B2B diseñados para simplificar y agilizar el proceso de compra entre empresas, ofreciendo características y funcionalidades específicas adaptadas a las necesidades empresariales, como catálogos específicos de productos, precios y términos contractuales.
5. Inteligencia artificial (IA): El 2023 fue el año en el que la IA fue tendencia por herramientas como Chat GPT. Por esta razón, el 2024 será el periodo en el que las empresas exploten su potencial e incorporen las herramientas de Inteligencia Artificial generativa en sus procesos. En compras y la cadena de suministro se van a ver usos como la generación de contratos, pronósticos de demandas, identificación de oportunidades de ahorro, propuestas de negociación, detección de fraudes, entre otros.

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Según el primer índice latinoamericano de Inteligencia Artificial, presentado recientemente por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), con un puntaje de 47,62 sobre 100, Colombia es el sexto país de la región con mejor implementación de esta tecnología, destacándose principalmente por los avances que ha tenido en términos de su regulación.

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