Con el título de docente se voló para Cúcuta en 1972, a recibir la bendición del padre Calderón. Tenía apenas 17 años. De ese matrimonio existen tres hijas: Claudia Mabel, Sandra Viviana y Meiber Xiomara Osorio Salcedo. Cuatro nietos varones, dos nietas y un bisnieto.
Y empezó a trabajar como docente en el colegio Juana de Arco y en el Estudios Comerciales para Señorita y continuó en Gremios Unidos, Comfanorte, Santa Teresa, La Presentación y en el Cardenal Sancha. En los actos cívicos siempre sus alumnas participaban con la danza.
El 15 de junio del 74 organizó su grupo folclórico en la Universidad Libre e hizo su primera presentación.
Tenía alumnos también del colegio Gremios Unidos porque existía un convenio con los estudiantes de 10 y 11. Ocho años después se independizó como Danzas Rosalba Salcedo.
Nunca quiso tener academia en casa ni en ningún lugar porque era sin ánimo de lucro y enseñaba sin cobrar. Al comienzo citaba a sus “chicos” al Instituto de Bellas Artes y después que lo cerraron se trasladó para la piscina olímpica. T
ambién ensayaba en los parques, en los colegios que la dejaran como el Inem. Pero en el 2002 apareció el mágico sitio de la Biblioteca Pública Julio Pérez Ferrero y se mudó, de manera definitiva. Se ha convertido en el punto de encuentros, de reuniones y de ensayos. Los martes, jueves y domingos son citas puntuales con sus estudiantes.
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En estos 50 años ha sembrado la semilla en miles y miles de bailarines y coreógrafos que se encuentran regados en todo el país.
Siente orgullo y se vanagloria de trabajar este medio siglo de manera ininterrumpida porque no se detuvo ni en pandemia por el COVID- 19 porque le tocó representar a la Biblioteca en los actos del Bicentenario en el Templo Histórico de Villa del Rosario con las danzas de la época.
Y en ese mismo trote anda sin asomo de cansancio, alentada por la presentación del sábado 15, a partir de las 7:00 de la noche, en la Biblioteca Pública Julio Pérez Ferrero, donde hará un recorrido con las danzas por todas las décadas, a partir del 70, esa misma cuando llegó a anclarse en este puerto seco fronterizo.