Sólido y realista, el Manchester City dio un gran golpe en la carrera por ganar la Liga Premier al imponerse 3-1 en la cancha del Arsenal, al que le arrebata el liderato, este miércoles en partido aplazado de la fecha 12.

Gracias a una mejor diferencia de goles (+36 frente a +26), el vigente campeón supera a los Gunners -ambos equipos tienen 51 puntos-, aunque estos últimos tienen un partido menos.

El belga Kevin De Bruyne adelantó al vigente campeón (24) y el internacional inglés Bukayo Saka igualó de penal antes del descanso (42). Ya en la segunda parte Jack Grealish (72) y el noruego Erling Haaland (82) dieron el triunfo al equipo dirigido por Pep Guardiola.

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En el Emirates, los Gunners terminaron de dilapidar su ventaja en la tabla en un duelo en el que fueron mejores en la primera parte, pero pagaron caro sus errores en la salida de balón ante un City que mejoró en la segunda mitad, mostrando más olfato y oficio que el aspirante a sucederle en el palmarés.

Error de Tomiyasu 

Consciente de lo que se jugaba el Arsenal salió a por todas ante un City un punto por debajo. Pero el error del japonés Takehiro Tomiyasu, que se puso nervioso a la hora de entregar un balón a su arquero, habilitó a De Bruyne, que finalizó con la clase que se le supone para poner el 1-0.

Los Gunners no acusaron el golpe y siguieron apretando. Finalmente consiguieron su premio cuando Edward Nketiah fue derribado por el arquero brasileño Ederson, cuando el delantero ya había golpeado el balón y el neerlandés Nathan Aké lo había sacado en la línea.

Saka, que antes se había dormido a la hora de finalizar una vibrante jugada coral, igualó engañando al internacional con la Seleçao, que de poco le sirvió marcar al extremo inglés con su mano donde quería que lanzara.

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Justo antes del descanso, en una jugada con varios rebotes, el medio español del City Rodri remató picado al larguero.

Rodri rondó el gol 

Fue el avance a una segunda parte del color celeste del City: Primero estuvo muy cerca de recibir un penal, tras un agarrón del brasileño Gabriel a Haaland. Una vez señalado, la jugada pasó por el VAR y se anuló por un fuera de juego milimétrico del delantero (56).

El City dominaba y mostraba contundencia en el área. Peligroso en los balones aéreos, Rodri no fue capaz de conectar bien su cabezazo (68).

Pero una combinación marca de la casa se convirtió en el gol del triunfo: en una recuperación de Bernardo Silva, el balón fue de derecha a izquierda a través de Haaland e Ilkay Gundogan hasta que llegó a Grealish, que marcó con un disparo raso.

Con los Gunners de rodillas llegó el momento de Haaland, que remató una jugada bien trenzada en la que recibió de su socio habitual Kevin De Bruyne.

El Arsenal necesita reaccionar tras tres derrotas y un empate en los últimos cuatro partidos si quiere mantener la esperanza de lograr su primera Premier League en 19 años.

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