El barrio La Merced fue el escenario que escogieron dos sicarios ayer para acabar con la vida de Julio César Fontecha Romero, de 38 años.
El ataque a bala se registró al mediodía, en un momento en que el tráfico era indescriptible en esa zona comercial de Cúcuta.
Aprovechando la congestión vial, una motocicleta Suzuki GN negra, abordada por dos hombres, se parqueó justo frente a una ferretería ubicada en la avenida 5 con calle 1.
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Los videos de las cámaras de seguridad evidenciaron las características de los hombres: uno vestía camisa roja, bluyín y portaba el casco, mientras que el otro llevaba un buzo gris, también un bluyín y un casco verde.
El parrillero descendió de la motocicleta con una bolsa en una de sus manos, pero nadie sospechó que en su interior portaba un arma de fuego.
Caminó hasta donde estaba su víctima, que se encontraba sentada, esperando que le pusieran el polarizado a su vehículo. Al estar de espalda, su agresor sacó el arma de la bolsa y le disparó en tres oportunidades.
Mientras Julio Fontecha intentaba salvarse y corrió en dirección opuesta, el pistolero regresó rápidamente a la motocicleta para huir con su cómplice.
Las balas también alcanzaron a dos personas más que a esa hora transitaban por el lugar. Uno de ellos fue Wilmer Eliécer Ortega Pabón, de 48 años, y la otra, una menor de 14 años. Ambos recibieron un impacto y fueron trasladados al Hospital Universitario Erasmo Meoz.
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Por su parte, el cuerpo de la víctima fue rápidamente rodeado por una veintena de espectadores que lo vieron tendido en la carretera, agonizando mientras esperaban la llegada de la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc).
La escena generó conmoción entre los presentes, quienes no podían creer lo que había sucedido a plena luz del día en un lugar tan transitado.
A la llegada de los uniformados se confirmó que el hombre ya no tenía signos vitales pues los balazos habían sido mortales.
El lugar fue acordonado por las autoridades y minutos más tarde, llegó la Brigada Interinstitucional de Homicidios (Brinho) a realizar la inspección técnica y levantamiento del cadáver.
Tenía esquema de seguridad
Luego de conocer la identidad de la víctima fatal, las autoridades confirmaron que Julio César era un ganadero oriundo de Saravena, Arauca, de donde fue desplazado por el Ejército de Liberación Nacional (Eln) en 2022.
Desde entonces, contaba con un esquema de seguridad que incluía un vehículo blindado y dos escoltas, quienes, justamente no lo acompañaban al momento del ataque.
Al parecer, Fontecha Romero podría haber tenido vínculos con la disidencia de las Farc, lo que, según algunas fuentes, habría motivado al Eln a desplazarlo de Arauca tras varios ataques en su contra.
Además, según un artículo publicado por un medio de comunicación nacional, se menciona que el hombre tendría relación con la desaparición y asesinato de un campesino en ese departamento.
Las autoridades están llevando a cabo investigaciones para esclarecer el hecho y verificar si el Eln estaría detrás del crimen.
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