Las pistas que tenían las autoridades sobre el transporte de un cargamento de cocaína desde el Catatumbo hacia Cúcuta fueron fundamentales para que uniformados de la Seccional de Tránsito y Transporte de la Policía de Norte de Santander, en coordinación con la Dirección de Antinarcóticos y el Ejército, pudieran hallar una camioneta con al menos 56 kilos de la droga.

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El operativo se desarrolló por los alrededores del distrito de riego, en El Zulia, cuando un hombre que conducía una camioneta, emprendió la huida al percatarse de la presencia de los uniformados.

“Cuando el sospechoso vio que el policía estaba esperando alrededor de una estación de servicio que está por Astilleros, de inmediato emprendió la huida y se dio una persecución que se extendió hasta un sector conocido como El Limoncito”, explicó una fuente judicial.

Según se conoció, el conductor del vehículo lo dejó abandonado y se internó en la zona boscosa, por lo que alcanzó a escapar del cerco de las autoridades.

Cuando los uniformados se acercaron al vehículo, de inmediato notaron que tenía una caleta en el planchón y por eso lo trasladaron a las instalaciones policiales para adelantar la inspección.

La Policía tuvo que utilizar herramientas para abrir la carrocería y así extraer los 56 paquetes que contenían la cocaína.

Alta pureza

Según se conoció, el cargamento incautado es de alta pureza, por lo que las autoridades están convencidas de que esta droga pertenece a una estructura de narcotráfico que exporta cocaína para Centroamérica, República Dominicana, Barbados, España y Países Bajos.

“Se está adelantando una rigurosa investigación para determinar a qué estructura pertenecía la droga. Estamos convencidos por la pureza de la cocaína, que es una organización grande, por lo que esto se tiene como un golpe importante para el narcotráfico”, explicó una fuente.

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Sin embargo, la única pista que tienen las autoridades es que los paquetes de la droga tenían una marquilla en forma de L.

Otra incautación

A finales de mayo, unidades de la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) de la Policía Metropolitana de Cúcuta, hallaron una volqueta que estaba estacionada en un parqueadero del barrio Trigal del Norte, con 115 kilos de cocaína.

Los uniformados arribaron rápidamente hasta el parqueadero, ubicando el vehículo, de placas de Santa Marta, color amarillo y modelo Ford 9000, por lo que la revisaron minuciosamente, encontrando la droga.

“No había un solo rastro sobre el conductor. Se cree que la volqueta fue cargada con la droga en Tibú y la trajeron a Cúcuta, la dejaron abandonada y se fueron sin que los empleados del parqueadero sospecharan de la cocaína”, dijo una fuente judicial en ese momento.

Los policías tardaron cuatro horas revisando y, hacia las 7:00 de la noche, descubrieron que en una de las tapas laterales de la parte trasera del vehículo había una placa metálica falsa.

Los uniformados descubrieron el cargamento y sacaron las ‘panelas’ que estaban marcadas con la palabra ‘AK-47’ y la imagen de un fusil.

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