Experiencia significativa
La maestra de la escuela rural Las Liscas en el municipio de Ocaña, Soraya Barbosa, resalta la oportunidad de los niños para recordar la historia moldeando los objetos más representativos con la arcilla. Es una experiencia maravillosa pues ellos aprenden mediante actividades lúdicas.
El programa incluye talleres donde mezclaron juegos, narrativas y habilidades manuales para acercarse a las tradiciones de la región a través de las prácticas significativas, recalcó la orientadora. “Fueron 6 talleres donde logramos que los niños entre 4 y 11 años interactuaran en la zona rural plantando una la semillita sobre los saberes ancestrales”, agregó.
La arcilla ocupó un lugar central en este proyecto inspirado en el arte precolombino donde los niños aprenden a moldear figuras que reflejan las tradiciones de los antepasados. Inicialmente conocieron el material orgánico de arcilla manipulando su textura, acercándolos con los relatos en la confección de piezas como vasijas y las ollas utilizadas en actividades de cocción de los alimentos de los aborígenes.
Figuras antropomorfas, de animales, dioses y representaciones de la naturaleza.