Aunque el presidente de la República, Gustavo Petro, evitó hablar en la instalación de la nueva legislatura de su controvertida propuesta de constituyente e insistió más en un acuerdo nacional, desde ya, en el Senado y la Cámara de Representantes sus máximos dignatarios dejaron claro que a esa idea no le caminan.
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La postura más firme la tiene el nuevo presidente del Senado, el conservador Efraín Cepeda, quien pese a haber recibido finalmente el respaldo del Pacto Histórico para dirigir la mesa directiva en este tercer año, en su discurso de posesión fue contundente al manifestar que lo que sugiere el jefe de Estado afecta la confianza de la corporación.
“Con respeto, y desde la tribuna del máximo foro de representación popular, se lo digo: con su discurso constituyente lo único que hace es minar la confianza en este Congreso, del cual usted hizo parte con todas las garantías. Un Congreso que representa a todos los colombianos y cuya votación, la expresión del soberano, fue ni más ni menos, de más de 22 millones 600 mil colombianos”, le dijo.
Cepeda, incluso, fue más allá y le planteó a Petro que en vez de estar pensando en constituyentes, los tres poderes públicos de Colombia deberían trabajar unidos en este nuevo periodo legislativo para recuperar la confianza de todos los colombianos en sus instituciones y en el país.
“La desinstitucionalización nos afecta a todos. Los desafíos que atraviesa el país requieren consensos en algunos puntos esenciales. Necesitamos recuperar la credibilidad institucional para enfrentar los enormes desafíos que nos plantea la pobreza, la criminalidad y la competitividad”, señaló.
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Y si bien el Gobierno logró mantener a un aliado suyo en la presidencia de la Cámara, al consolidar la elección del representante verde Jaime Raúl Salamanca, el congresista dejó claro que, aunque cree en el proyecto de cambio del presidente Petro, también tiene la certeza de que hay cosas que se deben repensar y reconsiderar para no volver al pasado.
En ese sentido, Salamanca fue enfático en advertir, en sus primeras declaraciones a los medios, que no cree que sea un buen momento para hablar de una nueva Asamblea Nacional Constituyente, aunque sí es partidario del acuerdo nacional que se viene impulsando.
“Eso no lo defino yo y no voy a ser yo única y exclusivamente quien tome las decisiones por un país. Aquí realmente hasta dónde se avanza y qué mecanismos se utilizan, lo sabremos producto del diálogo que lidere el ministro del Interior, el Gobierno Nacional y, por supuesto, cada uno de los líderes políticos, sociales y empresariales de este país y la academia. Todos deben ser protagonistas en las decisiones que se están tomando en este momento”, dijo el congresista.
¿Y el fast track?
Durante su intervención en el Congreso, el pasado 20 de julio, el presidente Gustavo Petro no habló de manera directa de constituyente, pero sí de otra propuesta que intentó refrendar ante las Naciones Unidas, bajo el argumento de que solo así podría ser posible salvar el Acuerdo de Paz: el fast track.
“Fast track, doctor Name, significa en español trámite rápido. No estoy hablando más sino de trámite rápido, lo cual implica acuerdos políticos, los acuerdos políticos para desarrollar los cambios de normas para volver realidad el Acuerdo de Paz y los cambios de normas que nos permitan la reactivación económica en la agricultura, la vivienda, el turismo y la industria”, manifestó el mandatario casi al término de su intervención y en respuesta a una de las críticas que le hizo el saliente presidente del Senado, Iván Name.
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Sobre esa iniciativa, el nuevo timonel del Congreso, el senador Cepeda, también fue claro en que no ve que haya ambiente ni un escenario apropiado para volver al mecanismo que ya se empleó en el gobierno de Juan Manuel Santos.
Además, fue enfático en que en esta legislatura no habrá proyectos de ley de primera o de segunda clase, pues aseguró que todas las iniciativas tendrán el mismo trato sean de gobierno o de los congresistas.
“Nuestra meta es que las diferentes posturas manifestadas por los partidos políticos en este recinto se aprueben o no por la fuerza o la fragilidad de sus argumentos, y no por la ausencia de posibilidades para hacerse oír en igualdad de condiciones”, expresó.
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Por su parte, el nuevo presidente de la Cámara fue un poco más flexible frente a esa posibilidad, pero insistió en que la decisión de impulsar o no el fast track debe ser consensuada.
“Hay que evaluar, objetivamente, qué elementos del proceso de paz tienen que ver con la ejecución en los ministerios, por un lado, y por otro lado, por supuesto, tenemos que valorar si es necesario una deliberación mucho más expedita de cara a poder cumplir con lo pactado y darle soluciones al pueblo colombiano que espera un país en paz y con oportunidades”, dijo.
Sin embargo, Jaime Salamanca insistió en que no será el presidente de la Cámara quien tome esas decisiones, sino todos los actores que participen en el marco del acuerdo nacional.
Celeridad sí, pero no necesariamente fast track
A pesar de que el presidente Gustavo Petro habló en el Congreso de fast track para la implementación del Acuerdo de Paz suscrito en 2016, esta no sería precisamente la figura que usaría el Gobierno Nacional para agilizar la puesta en marcha de los planes y programas que allí quedaron consignados.
Así lo dejó claro el propio ministro del Interior, Juan Fernando Cristo, en entrevista con medios de comunicación nacionales, en donde explicó que acudir a la vía rápida implicaría un año más, pues antes es necesario que el Congreso apruebe un acto legislativo que le dé vía libre a esa posibilidad.
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“Hay que reflexionar muy bien si vale la pena ahora que estamos en la mitad del Gobierno, si invertimos un año más para aprobar un acto legislativo para después llevar la reforma al Congreso”, le dijo Cristo a RNC Radio.
Los mismos congresistas del Pacto Histórico, la coalición de Gobierno, reconocieron, tras un encuentro con el ministro de la política, que la figura del fast track, por ahora, está descartada.
“Hay la necesidad de un paquete legislativo que se va a tramitar de la manera más rápida posible. El ministro fue claro en decir que no es ahora el momento para el trámite de una herramienta como fast track, sino de agilizar los procedimientos”, aseguró el senador Iván Cepeda, al término del encuentro con Cristo.
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