Ladrillera San José está en el camino de la transición energética, en busca de cambiar el carbón por un combustible más limpio; por eso, desde hace tiempo, viene trabajando en la utilización de una biomasa, para alternarla con el uso del mineral.
Sonia Lizarazo, coordinadora de Innovación, Desarrollo y Calidad de la empresa, una de las participantes del Encuentro Nacional de la Arcilla, la Cerámica y la Construcción (ENAC), realizado este miércoles, jueves y viernes en el Hotel Casino Internacional de Cúcuta, indicó que idear procesos productivos amigables con el medio ambiente requiere gran inversión y es “bastante riesgoso”.
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Sostuvo que también están enfocados en la implementación de un proyecto de generación de energía con paneles solares y en la visión 30/30, para el adecuado uso de los residuos plásticos.
“Es muy bueno que se generen estos espacios, los cuales conectan al Estado, la academia y la industria y donde pueden surgir cosas buenas. Si tenemos el apoyo del Estado, de la academia y unos unimos como gremio, será más viable desarrollar proyectos”, agregó Lizarazo.
Johana Navarro, presidenta de la Asociación de Industriales de la Arcilla (Induarcilla) y organizadora del ENAC, manifestó que la actividad tuvo el objetivo de escuchar a quienes pertenecen la cadena de valor de cara a la transición energética, “el reto más grande”.
“Sabemos que tenemos que hacer un cambio; de hecho, las empresas están dispuestas a hacer esos cambios, siempre que se miren desde la perspectiva económica, porque hacer un cambio tecnológico es muy costoso… Hay que hacer transformaciones en los hornos para que impactemos menos en la calidad del aire”, añadió.
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Navarro resaltó que se requiere construir una política pública, para poder volcarse a un combustible distinto. Por eso, espera que de esa mesa interinstitucional surjan aportes para esa política pública. Resaltó que del encuentro saldrá un documento con un informe de cómo está el sector y cuál es la mirada de la sociedad, para dárselo a los empresarios.
Trasformación de hornos, para mejorar aire
El docente Mauricio Enrique Soltelo, de la Facultad de Ingeniería y Arquitectura de la Universidad de Pamplona y director del grupo de investigación Punto, indicó que se requiere la vinculación del Gobierno para impulsar las nuevas políticas en torno a la arcilla y la construcción.
“Las arcilleras deben hacer esa conversión de los hornos colmena, que no es tan fácil, porque las empresas no tienen esa grandes cantidades de dinero y Norte de Santander no cuenta con la infraestructura. Por eso el Gobierno debe apoyar esa parte y la academia aportar en el desarrollo de nuevos productos”.
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Paola Parra Cañas, responsable de Gestión Técnica del Laboratorio de la Calidad del Aire del SENA en la región, el cual se encarga de determinar ciertos contaminantes en el ambiente, informó que acudieron al encuentro para ver posibles alianzas con empresarios a los que puedan brindar sus servicios.
“Debido a que la calidad del aire afecta la salud humana, el sector de la arcilla está muy receptivo al trabajo articulado, que permita un monitoreo de esos contaminantes y así poder implementar estrategias y planes que mitiguen el impacto negativo al medio ambiente”, concluyó.
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