En enero próximo, el gimnasta buscará su cupo para estar en los Juegos Olímpicos Londres 2012. Este cucuteño ha logrado salir avante de las adversidades y con base en tenacidad está dentro de los atletas más destacados del país.
Lágrimas ruedan por el rostro del gimnasta cucuteño Jossimar Calvo al hablar de su mamá, Nohora Moreno. El campeón panamericano de gimnasia ha dedicado 12 de sus 17 años de edad a esta disciplina. Horas y horas de entrenamiento y sacrificio dan satisfacciones a este ‘pequeño gigante’ del deporte colombiano, más cuando sus logros le permitieron hacer realidad uno de sus grandes sueños: tener casa propia.
 
Nohora es quien guía los destinos de este nortesantandereano, quien lo anima, lo cuida cuando se presentan las lesiones, la que lo encomienda a Dios cada vez que sale a ejecutar sus rutinas y, por sobre todas las cosas, la mujer a quien han estado dedicadas las cien medallas que este deportista ha alcanzado en su carrera.
 
El metal dorado que Jossimar consiguió el pasado 26 de octubre en tierras mexicanas partió en dos su vida, al igual que la de su progenitora. Gracias a ese triunfo los ojos de todo el país se enfocaron en volver a ver que muchos deportistas nacionales viven en medio de la pobreza y, a pesar de ella, logran salir avantes en sus carreras. Además, dan ejemplo de que el esfuerzo y la disciplina, tarde o temprano, dan sus frutos.
 
“Se puede llegar a grandes cosas, a estar en mejores posiciones en un mundial y hasta en unos Juegos Olímpicos, pero para eso hay que esforzarse mucho y trabajar muy fuerte”, dice Calvo al respecto.
 

EN MÉXICO SE ABRIÓ UNA SENDA

 
Las casi seis horas diarias que Jossimar dedica a trabajar de la mano de su entrenador, Jairo Ruiz, son parte de la cuota que este juvenil gimnasta ha dado en su afán de salir de la pobreza. Aquella vieja ‘casa’ que tenía un candado como único cerrojo, por fortuna ya es cosa del pasado. Hoy una nueva vivienda, en el sector Prados del Este, en Cúcuta, es el máximo reconocimiento a una naciente carrera deportiva.
 
La llave que abrió dicha puerta fue la del oro en Guadalajara. Ese miércoles la historia de la gimnasia colombiana se hizo grande. Jossimar sabía que el trabajo iba a ser duro, no empezó bien, pero al final logró superar en la prueba de ‘all around’ (‘todo evento’) a los mejores del continente, entre ellos a su gran amigo y consejero, el antioqueño Jorge Hugo Giraldo.
 
“Eso era algo que no me esperaba, me cayó de sorpresa. El primer día había quedado sexto, pero mi entrenador me dijo que lo importante era hacer bien mis rutinas y que con eso bastaba. Lo hice y así le pude dar este oro a Colombia (…) Recuerdo mucho cuando me presenté al arzón, mi último aparato, allí sí estaba nervioso, porque veía las posiciones e iba cuarto, entré a hacer bien las cosas, me bajé y me dijeron que había sido segundo detrás de Giraldo, pero luego entregaron el veredicto y yo había quedado primero. Quedé en shock”.
 
‘Jossi’, como le dicen sus familiares y amigos, sabe que el 2011, que está por terminar, puede ser el punto de partida para una nueva era, la de éxitos, la de felicidad, la de un mejor vivir. En sus primeros Juegos Panamericanos pudo conseguir un oro, por ello aspira que lo que venga sea mucho mejor.
 
“Me siento muy contento, porque gracias a Dios este año me ha ido muy bien. En nacionales, suramericanos y en los panamericanos las cosas se dieron de buena manera”, aduce el gimnasta, pequeño en estatura, pero grande en talento.
 

BUENOS CONSEJOS

 
Los especialistas en psicología deportiva aseguran que el entorno que rodea a los atletas es vital para su buen desempeño competitivo. En ese punto el soporte que Giraldo ha dado a Jossimar ha sido clave; no en vano, el mejor gimnasta que ha dado Colombia en toda su historia (el antioqueño) afirma que hay algo que le ha impulsado a no cesar su carrera: pasar sus experiencias a las nuevas estrellas de la actividad.
 
“Él es una gran persona, para admirar, alguien que en todas las competencias, cualquiera que esta sea, siempre está con nosotros, nos apoya. A mí, que soy el menor de la selección, es al que da más consejos, me pregunta si estoy nervioso y me dice que no piense en eso, sino en hacer bien mis ejercicios”, cuenta el cucuteño.
 
Su otro bastión es Nohora, la misma persona que le motiva a seguir adelante, por quien derramó lágrimas emocionado durante esta charla y por quien alcanzó el sueño de tener casa propia: “Es un gran apoyo ya que desde que inicié mi carrera deportiva, hace 12 años, siempre ha estado conmigo. Ha luchado porque tenga todo, se ha esmerado por darme todo lo que necesito y gracias a ella no me ha faltado nada”.
 
Para su carrera siempre ha contado con el apoyo de Coldeportes, pero para edificar su nueva vivienda fueron los entes gubernamentales y empresas privadas (especialmente el diario La Opinión) las que le tendieron la mano. El cambio de vida ha sido sustancial; estar bajo un techo más seguro le anima a seguir adelante, más aún, cuando sabe que ser joven no es impedimento para alcanzar la meta de estar en Londres 2012.
 
“Es algo difícil, más no imposible; como he dicho, la edad no importa, las que valen son las ganas que se pongan, la disciplina, que quiera cumplir mis metas, por más difíciles que sean. Trabajo para cuando llegue el momento del preolímpico dar lo mejor de mí”, indicó.
 
Precisamente en la capital inglesa, en enero próximo, buscará su cupo para las máximas justas deportivas del planeta. Este mes de diciembre lo alternará entre algo de descanso y entrenamientos, sabiendo que junto a Giraldo luchará por tener el privilegio de defender la bandera tricolor en la cita orbital.
 
Para Jossimar los frutos están llegando, la gloria también; por ello ese reconocimiento del que hoy goza en su natal Cúcuta es simplemente la cuota inicial de una recompensa que la vida le ha tenido guardada y que, de a pocos, le ha ido entregando.
 

EL CAMINO DORADO EN GUADALAJARA

 
Jossimar Calvo consiguió 86.400 puntos en el concurso completo individual en la gimnasia de los Juegos Panamericanos, hecho que le valió el primer cajón del podio.
 
Este cucuteño consiguió para el país el primer oro en unas justas continentales, tras superar a Jorge Hugo Giraldo por 200 puntos y al chileno Enrique Tomás González, quien contabilizó 86.050 unidades.
 
La prueba de ‘all around’ cobija actuaciones en todos los aparatos: suelo, caballo con aros, anillas, salto, barras paralelas y barra fija.