Para una estilista del barrio Ceiba 2 la vida le dio un repentino giro cuando, el pasado sábado, unos ladrones ingresaron hasta su habitación y le robaron una millonaria suma que había ahorrado durante años.

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“Yo sé que el dinero no se va a recuperar, espero que las autoridades identifiquen mediante videos de cámaras de seguridad a los responsables y los capturen y esto no quede en la impunidad porque es muy difícil trabajar duro para tener algo y de un momento a otro lo roben”, dijo la mujer.

Según se conoció, el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) asumió el caso y recolectan evidencias sobre cómo ingresaron los ‘amigos de lo ajeno’ a la vivienda, ubicada en la calle 7N con avenida 3 de ese popular sector, y se llevaron la plata.

El hurto

La mujer recordó que ese sábado, hacia las 6:20 de la tarde, cerró el salón de belleza, que tiene en la vivienda, llamado Claudia In,  se despidió de las empleadas para luego irse junto con su hermana a hacer una diligencia.

“Yo tengo una empleada de confianza que se encarga de cerrar el negocio, cuando regresé, hacia las 9:30 de la noche, veo la puerta del porche abierta. Yo no alcanzo a imaginar quién pudo haber sido, pues nadie sabía de ese dinero”, dijo la afectada.

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La primera reacción de la estilista al ver la puerta ‘de par en par’ fue llamar a las autoridades para que llegaran a la residencia, ingresaran para verificar si había alguien dentro.

Los policías al entrar a la vivienda notaron que los ladrones habían desordenado la sala, el comedor y la cocina. Se dirigieron al segundo piso y encontraron la misma escena, hasta que llegaron a la habitación de la víctima y notaron que el closet estaba abierto, la ropa por fuera y no había rastros del dinero.

Y es que los billetes estaban en una de las gavetas del closet, bajo llave, por lo que los investigadores revisaron minuciosamente ese mueble en la búsqueda de huellas dactilares que permitan la identificación de los ladrones.

“A mí los del CTI me dijeron que así yo estuviera los ladrones iban a llevarse la plata seguramente. Gracias a Dios yo salí ese sábado, sino hasta me amordazan y amarran para cometer el hurto”, indicó la propietaria.

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