En la familia de Socorro Báez, de 55 años, aún permanecen intactos los recuerdos de aquella mañana del 29 de septiembre de 2021, cuando la camioneta que conducía el sacerdote Jesús Osma Aldana, párroco de la iglesia San Pío X, la atropelló frente a su lugar de trabajo, en el barrio Kennedy, de la ciudadela Juan Atalaya.
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La víctima se fracturó el brazo izquierdo, además de sufrir múltiples golpes en su cuerpo, que todavía la mantienen en terapias de recuperación.
Los familiares de la mujer insistieron en que, un año después del suceso, ella no ha sido reparada y por el contrario, se han incrementado los gastos por la atención médica que han tenido que tener durante este tiempo.
“Mi mamá no ha podido volver a trabajar como lo hacía antes, todos los días. No sabemos cuánto tiempo pueda seguir así y del responsable del hecho no sabemos nada”, explicó la hija de la afectada.
Aunque La Opinión intentó conocer la versión de la Diócesis de Cúcuta, hasta el cierre de esta edición no se obtuvo ninguna respuesta.
El accidente
En algunos videos quedó grabado el momento en el que a las 5:15 de la mañana del 29 de septiembre, la camioneta se acercó de manera repentina y golpeó fuertemente el vehículo de propiedad del esposo de la mujer, que estaba estacionado en el lugar y posteriormente la arrolló a ella, expulsándola algunos metros, mientras el vehículo blanco, de alta gama, se volcó.
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“Nosotros acabábamos de llegar de la Central de Abastos, como todos los días y ya íbamos a abrir la venta de frutas. Mi señora se bajó del carro y estaba sacando algunas bolsas cuando esa camioneta se le vino de frente”, recordó en ese momento Hernando Ortega, la pareja de la víctima.