A pesar de los reclamos hechos por transportadores, empresarios, socorristas y autoridades ambientales persiste la emergencia vial en la circunvalar de Ocaña.
En noviembre del año pasado un tramo de la calzada colapsó a la entrada del sector de La Laguna del barrio Cristo Rey, impidiendo el normal tráfico vehicular en el corredor que comunica con la capital del departamento, el interior del país y la costa norte colombiana.
Para arreglar los puntos críticos en el eje vial se habían asignado 9 mil millones de pesos y cuando se hacían los trámites para ejecutarlos sobrevino la avalancha en la vereda El Tarrita el 31 de mayo del presente año donde todos los recursos fueron trasladados hacia la urgencia manifiesta para atender el desastre natural, indicó el presidente de la Asociación de Camioneros de Colombia, capítulo Norte de Santander, Yamil Antonio Galeano Arenas.
Mientras los transportistas aconsejan la ejecución de las obras en la época de verano, aprovechando el bajo flujo vehicular, los representantes del Instituto Nacional de Vías indicaron que primero se debe superar el escollo y habilitar la circulación de los automotores para mitigar el descalabro económico. “En diez meses no se ha movido una piedra, eso demuestra el grado de abandono de esta región”, afirmó el taxista Jesús Clavijo.
El director de la Territorial en Ocaña, ingeniero Elías Jaime Fernández, explicó que se tiene una partida de 116 millones de pesos para evitar que se agrande el daño y permitir el paso vehicular a un solo carril.
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Sin embargo, cálculos de expertos apuntan a que en la recuperación del tramo afectado se requiere la construcción de un muro con micropilotes debido a la profundidad que estaría superando una cifra de 800 millones de pesos.